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tres tips para reconocer a un "trabajólico" de corazón

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Siempre tienen excusas para estar en la "pega"

"Lo más típico es que estas personas no tomen la iniciativa para regular su comportamiento. Siempre tienen buenas excusas", dice el académico de la Universidad de Chile, Carlos Díaz, sobre las razones que da uno de estos trabajadores para pasar más tiempo en la oficina. Ojo con las frases "tengo que adelantar trabajo" y con los constantes "es que estamos en el peak de trabajo del año", sobre todo si el último 'peak' hace poco. Ponga freno si es que se pierde las fechas importantes de la familia.


Reclaman por todo

Si alguien se queja mucho del trabajo, es el primero en llegar y el último en irse, no almuerza o come frente al computador, llega siempre cansado o irritado a la casa, y siempre está molesto por las herramientas de la oficina, ponga ojo. La psicóloga laboral Denisse Dorat dice que los reclamos pueden ser que "el internet es lento, el celular no funciona, el sistema interno es deficiente. Estas son algunas señales para identificar a una persona que está excesivamente comprometida con el trabajo" .


Les duele hasta "el alma"

Ambos expertos coinciden en que el estrés y la irritabilidad son señales claras del problema, pero advierten que hay que poner mucha atención cuando esto se transforma en dolores de cabeza (migrañas), espalda o cintura. "El cuerpo comienza a somatizar toda la presión que tenemos por el trabajo", dice Dorat. Díaz plantea que se debe tener cuidado con quienes consumen "analgésicos o aquellas personas que toman café reiteradamente. Además, se ven agotadas, tienen sueño y bostezan constantemente".

[Trabajo]

Sepa cómo ayudar a un trabajólico a aflojar un poco en la oficina

Expertos explican que los trabajadores crónicos son los que se quedan pegados en la oficina y no necesariamente los que lo hacen mejor. Sugieren hacerles ver su problema, recordarles que hay un mundo afuera y acordar límites con ellos.
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Michael Seguel P.

Pensar en el trabajo todo el día es un mal que puede afectar a alguno de sus seres queridos. En una época en que el éxito está ultra valorado socialmente, suelen aparecer los "trabajólicos", que son esas personas que siempre prefieren adelantar "pega" a juntarse con un amigo a tomar una cerveza y que, en casos más "crónicos", pueden perderse aniversarios o cumpleaños de la familia.

Todo... por el trabajo.

"Son personas que no tiene conciencia y sienten que es necesario o útil estar mucho tiempo en el trabajo, aunque no necesariamente significa que sean eficientes", dice Carlos Díaz, especialista en psicología del trabajo y las organizaciones de la Universidad de Chile.

El problema, como lo menciona el experto, es que ser productivo consiste en hacer el mejor trabajo en el menor tiempo posible, que es lo contrario de quedarse pegado en la oficina porque sí.

Para que esto no ocurra, La Estrella le entrega consejos para ayudar a sus cercanos con este grave problema.

Mostrar el problema

La primera medida con un trabajólico es hacerle ver a ese cercano, que tiene un problema que resolver.

Para Denisse Dorat, psicóloga laboral de GrupoExpro, "en general, las personas trabajólicas no se va a dar cuenta de que lo son. Por eso, el 'partner' del trabajo debe dar las señales de que está trabajando mucho. Ideal, salir de la oficina con el compañero, aunque sea a mirar los árboles unos 15 minutos".

La experta añade que tener en el escritorio imágenes de la familia (hijos, pareja o papás) es un recordatorio y puede ayudar a que alguien se dé cuenta de que no puede estar ininterrumpidamente frente al computador.

Almorzar afuera

Para Dorat, es importante salir a comer fuera de la empresa (los días de trabajo) y de la casa (los días de descanso, a menos que tenga alguna reunión familiar), para así "liberarse" por un rato.

Díaz añade que es útil aprovechar estas instancias, pero sin ponerle presión al "trabajólico".

"(Ellos) tienen una cierta ansiedad por hacer sus labores, por lo tanto, al salir no hay que romper su rutina, ni siquiera en el almuerzo", dice el académico de la U. de Chile.

También aconseja preguntarles por sus horarios y averiguar en qué momentos se los puede llamar, de manera de encontrar en ellos una mejor disposición.

"Una llamada por teléfono mientras va en el auto, micro o Metro, y apenas sepa que salió del trabajo, será un factor que poco a poco irá 'amoldando' su conducta", afirma Denisse Dorat.

Evitar los retos

Los expertos también aseguran que retar a los trabajólicos, no es la mejor táctica para que cambien de actitud.

Ambos expertos coinciden en que lo mejor es establecer compromisos.

"Hay que hablar de qué cosas sí y qué cosas no se pueden hacer en la relación", dice Dorat.

"Poner plazos y días en que la familia se juntará, será útil para no estresar al trabajólico y que sepa que esto es un proceso en que la persona debe crecer y asumir su responsabilidad", recalca Carlos Díaz.

"Una llamada por teléfono mientras va en el auto, micro o Metro y apenas sepa que salió de trabajo, será un factor que poco a poco irá 'amoldando' su conducta".

Denisse Dorat, psicóloga laboral de GrupoExpro"