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El vuelto les acercó el mundo a niños del Cree

Menores con discapacidad intelectual realizan salidas a terreno como parte de un programa que fomenta la inclusión social y a futuro, la laboral.
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Francisco (13) luce feliz. A pesar de la acondroplasia que lo afecta y que le causó enanismo, el niño es descrito por sus "tíos" del Centro de Rehabilitación y Educación Especial (CREE) como un menor como cualquier otro, que gusta bromear y jugar con los demás.

Francisco pudo participar de una visita al terminal pesquero. Y curiosamente, al igual que sus 16 compañeros, ver a los lobos marinos fue lo que más le llamó la atención. Incluso los pescadores les dieron pejerreyes para que pudieran alimentarlos. Ese día fue inolvidable para este grupo de niños con capacidades distintas.

Muchos de ellos no tienen la posibilidad de participar de actividades recreativas. Por eso, cuando tienen salidas a terreno, la alegría se plasma en sus caritas infantiles.

Rodolfo Mally, es uno de los profesionales del CREE, institución que se fundó en 1968 y que actualmente atiende a 90 niños y jóvenes con necesidades especiales. Rodolfo participó junto al grupo de 17 pequeños en el programa "Todos somos un mundo: Inclusión y comunicación para el desarrollo de nuestros niños". La iniciativa forma parte de la Fundación Descúbreme.

Su vuelto sirve

- ¿Desea donar cinco pesos de su vuelto? es la pregunta típica que realiza la cajera cada vez que vamos al supermercado. Pues bien, los tres, cinco, ocho o diez pesos que se donan en la cadena Unimarc, son destinados a financiar proyectos como el que ejecuta el CREE.

"Pensamos en algo que realmente beneficie a los niños en situación de discapacidad. Por eso hicimos un proyecto de comunicación aumentativa y alternativa, que beneficia a niños desde los 10 a 21 años", explica Mally.

'Todos somos un mundo' busca brindarle a los menores las herramientas para que puedan tener el desarrollo de una cultura inclusiva. Porque el tema de la inclusión enfocada desde la discapacidad intelectual, incluye lo laboral", explicó Mally.

Para ello, los profesionales del centro trabajan la comunicación alternativa y aumentativa mediante tablet y un programa de comunicación para que puedan aumentar su léxico y habilidades cognitivas.

Uno de los ejercicios a los que se enfrentaron los pequeños fue que en clases y mediante imágenes, debían reconocer diversos alimentos. Posteriormente, tuvieron una visita al supermercado donde vieron 'en vivo' los productos y los identificaron.

"Vimos avances significativos. Pasamos de conocer ciertas frutas, verduras y alimentos a realizar el manejo básico del dinero, para que el niño sea capaz de reconocer monedas y hacer cálculos simples".

Dentro del proyecto se incorporan las salidas a terreno inclusivas, donde además del supermercado y el terminal pesquero, han podido visitar museos. "De los 17 niños, solo tres o cuatro habían salido antes a estos lugares, así que tener la instancia de sociabilizar y sentirse incluidos en espacios donde los niños hace un tiempo atrás estaban marginados, nos deja un muy buen sentimiento", dijo Mally.

Para el próximo año el CREE quiere postular el proyecto de laboratorios de computación inclusivos, que apoyen la lecto escritura básica en los niños. Por eso, piénselo bien la próxima vez que vaya al supermercado y le pidan donar parte de su vuelto, pues este realmente sirve.