Delincuentes utilizaban a un niño para cometer asaltos
El menor estaba fugado de un centro del Sename desde el 2016.
"Qué hace este niñito en la sala" fue lo primero que expresó la jueza de Garantía Gabriela Abusabal, cuando vio al imputado, sentado en el banquillo de los acusados junto a dos adultos por haber cometido un robo con intimidación.
Al consultarle la magistrada por sus antecedentes, el menor le señaló que tenía 14 años y que no estaba estudiando hace más de un año. Su contextura física y su estatura parecían más bien de un niño de 12 años.
Detención
El menor fue detenido en horas de la noche del jueves, tras robar un teléfono celular. El fiscal Luis Soriano contó que el hecho ocurrió a las 21:45 horas, cuando los tres imputados intimidaron a un hombre que se encontraba junto a su sobrino de 3 años al interior de su camioneta que estaba estacionada en la esquina de Maipú con Máximo Lira. Uno de los sujetos, Pablo Orellana (40) se acercó a la víctima y se hizo pasar por carabinero, manifestándole que tenía que salir del auto por estar mal estacionado, luego llegaron los otros dos sujetos. El adulto Richard Cejas González (39) con una piedra comenzó a golpear la puerta del copiloto, mientras que el menor le gritaba que entregara el teléfono celular con la amenaza de quebrarle todos los vidrios del auto. Como la víctima estaba junto a un pequeñito de 3 años le entregó el teléfono a los delincuentes y huyeron del lugar.
Características
Pero la víctima se fijó bien en la ropa de los sujetos, de los cuales el menor llevaba una camiseta de la selección chilena, número 7 y el otro una chaqueta con capucha.
Carabineros logró dar con ellos y hasta le encontraron el celular, por lo que fueron detenidos y formalizados por robo con intimidación.
Pero al discutir las medidas cautelares pidió la palabra, Héctor Pérez, director (s) del Centro de Reparación Especializada de Administración Directa (Cread) del Sename, quien expuso que el menor pertenece al Cread y que en septiembre del año pasado se fugó, existiendo una orden de búsqueda. Señaló que el menor estuvo en condición de calle, sin estudiar y con problemas de adicción.
Por su parte, la jueza calificó como grave que dos adultos se aprovecharan de la vulnerabilidad de un niño para hacerlo delinquir y declaró de inmediato la prisión preventiva para ambos.
En tanto el menor por una orden del Tribunal de Familia volvió al Cread. Se fijó un plazo de 60 días para la investigación.