Detectives de la Prefectura de Extranjería y Policía Internacional, mientras realizaba una fiscalización de extranjeros en las residenciales próximas al Terminal internacional Arica-Tacna, conforme a un requerimiento realizado por la Municipalidad de Arica, descubrieron una bodega en uno de estos recintos, que contenía apilados gran cantidad de cajas con cigarrillos de contrabando.

Los oficiales policiales lograron establecer que el encargado de la residencial, obtenía los cigarrillos de diferentes personas que provenían de Tacna-Perú, todo esto previo pago de dinero en efectivo, para luego almacenarlas en la bodega de la residencial. Por esta razón se procedió a la detención de la persona por la responsabilidad que le asiste por el delito flagrante de Infracción a Ordenanza de Aduana, siendo trasladado al cuartel, luego por instrucción del Fiscal de Turno quedó apercibido al Art. 26° del Código Procesal Penal, quedando posteriormente en libertad.

Se incautó la cantidad de 1498 cajetillas de cigarros, avaluadas aproximadamente en $1.500.000 pesos.

Con prohibición de salir de su casa quedó el falso técnico, quien ofrecía servicios de reparación con el único objetivo de adueñarse de lo ajeno, principalmente de celulares, notebooks y tablets.

Las denuncias realizadas por las víctimas permitieron que la Fiscalía junto con personal de la Brigada de Investigación Criminal (Bicrim), lograran detener a este sujeto.

Ayer, Marlon G. O de 57 años estuvo sentado en el banquillo de los acusados y fue formalizado por el delito de hurto simple reiterado por un total de 10 hechos, siendo que existen 15 denuncias.

Según los antecedentes que expuso el fiscal Elías Gutiérrez en la audiencia, el imputado llegaba a los domicilios particulares o locales comerciales a ofrecer sus servicios de reparación o mantenimiento a maquinarias de refrigeración o conservación, a precios módicos. En tanto, mientras realizaba el diagnóstico y presupuesto, aprovechaba el descuido de los locatarios o dueñas de casa para proceder a sustraer artículos de valor

Víctimas

Fue así que el imputado engañó a varias personas de distintos locales; robó un celular en la Pizzería Mondini, en un ciber de la avenida Diego Portales, en el Pollo Chip, al local de comida Andresito, en la empresa Golden Omega y la Clínica San José. En todos estos lugares utilizó el mismo modus operandi; llegaba al lugar ya sea ofreciendo sus servicios y en otros casos manifestaba a sus víctimas, principalmente de locales donde había sido contratado para reparar las máquinas.

El jefe de la Bicrim, comisario Daniel Catalán, contó que los detectives venían recabando información hace meses, viendo un patrón común que se repetía en las denuncias por el delito de hurto, " en virtud a esta información, al trabajo científico técnico y reconocimiento fotográfico realizado por las víctimas, los oficiales pudieron establecer la individualización y la ubicación del sujeto, logrando así su detención", expresó el comisario.

A su vez hizo un llamado a la comunidad, a estar precavidos cuando se presenten extraños ofreciendo este tipo de servicios. "Las personas deben solicitar su identificación, corroborar que proceden de la empresa que indiquen y estar siempre presentes en caso que se realice algún trabajo en el lugar".

El imputado fue formalizado por el delito de hurto simple reiterado.

Si bien el fiscal solicitó su prisión preventiva, el Tribunal no accedió a dicha petición y se decretó su arresto domiciliario total.

Por el delito de robo con intimidación fue formalizado por el fiscal Elías Gutierrez un hombre que intimidó a su víctima con un cuchillo para que este le pasara un envase de leche.

El hecho se registró a las 22:30 horas cuando el imputado, Pablo J. L. de 38 años llegó hasta un almacén ubicado en la Población Nueva Esperanza.

Según los antecedentes expuestos por el fiscal el imputado solicitó que le vendieran una leche, sin embargo, este sacó un cuchillo tipo cocinero y se lo colocó a la altura del pecho a la vendedora y le gritaba "Pásame la leche o te mato" y salió corriendo del local.

La víctima llamó al 133 y llegó al lugar carabineros de la Primera Comisaría; el afectado contó a los policías que estaba ordenando la mercadería porque estaba a punto de cerrar cuando ingresó un hombre, quien le atacó con un cuchillo. Este le dio las caracteristicas físicas del ladrón y cómo vestía. Con estos antecedentes, los uniformados en un patrullaje lograron divisar al agresor; el hombre al percatarse de la presencia polical arrojó al suelo el cuchillo y procedieron a su detención.

Ayer en el Tribunal de Garantía el imputado declaró que efectivamente fue al almacén, pidiendo leche porque le habían envenenado a su perro. Aclaró que solo amenazó a la víctima y que nunca la atacó con un cuchillo.

Si bien en una primera instancia la jueza decretó su prisión preventiva, el hombre le pidió que no lo dejaran encerrado, debido que hace dos meses fue papá y que se estaba portando bien.