Con el 60% de su cuerpo quemado resultó un trabajador de 50 años al interior de un taller del Barrio Agtima de la Empresa Cormetar.

La víctima permanece internada en la UCI del Hospital Regional con diagnóstico grave y en riesgo vital. Debido a la gravedad de sus heridas se estaría analizando la posibilidad de trasladarlo a Santiago.

Por instrucción del fiscal de turno, Francisco Ganga, las diligencias para esclarecer este accidente quedaron a cargo de carabineros de la Sección de Investigación Policial (SIP) de la Tercera Comisaría.

El hecho

El accidente se registró a las 9:23 horas. Según antecedentes de la investigación dos personas, ambas chilenas se encontraban en dependencias de un taller, ubicada en la Manzana b Sitio 27 del Barrio Agtima, realizando labores habituales de trabajo en un camión grúa, no percatándose ambos operarios de una viga de metal de grandes dimensiones la cual pasó a llevar los cables del tendido eléctrico de alta tensión produciéndose una descarga eléctrica que habría lesionado a uno de los trabajadores, Rodolfo Jesús Arce Godoy de 50 años.

Diligencias

Personal de la SIP concurrió al lugar del accidente, fijaron fotográficamente el sitio del suceso y tomaron declaraciones a testigos. La policía especializada está realizando diligencias que están centradas en esclarecer si el trabajador se encontraba con las medidas de seguridad y cuál fue el origen del accidente.

Este medio se trasladó a Cormetar para conocer la versión de la empresa, pero sus representantes se mantuvieron en reunión durante todo el día.

Hasta el cierre de la edición el trabajador permanecía grave, en coma inducido.

Un ciudadano peruano fue detenido tras ser sorprendido por detectives de la Brigada de Robos de la Policía de Investigaciones PDI, trasladándose por las cercanías del Terminal Internacional, con el fin de comercializar diversos productos derivados de delitos. Según la investigación el hombre recorría este lugar para vender las especies y para su posterior salida del país y así perder su rastro.

El hombre quedó al descubierto mediante un trabajo científico técnico, ya que lograron establecer la identidad de la persona, resultando ser un ciudadano peruano de 36 años, el cual utilizaba el lugar donde pernoctaba habitualmente en el centro para el acopio y reducción de especies producto de ilícitos como celulares y cámaras fotográficas.

Una vez autorizada la orden de entrada y registro por parte de un juez del Tribunal de Garantía al domicilio del imputado, los policías encontraron una gran cantidad de cigarrillos y diversos aparatos celulares de distintas marcas, incluso uno de ellos contaba con una denuncia por hurto en la misma Brigada. Por lo anterior se procedió a la detención de la persona, por la responsabilidad que le afecta en el delito flagrante de contrabando y receptación.