El alcotest marcó 1,52 gramos de alcohol en la sangre y al momento de su detención entregó a Carabineros una cédula de identidad y la licencia de conducir que resultaron ser de su hermano. Todo lo hizo por registrar seis condenas por manejo en estado de ebriedad, motivo por el cual y tiene su licencia suspendida, lo que significa que no debería estar conduciendo. Sin embargo, este hombre a las ocho de la mañana chocó a un furgón escolar, manejando en estado de ebriedad.

Los hechos

De acuerdo a los antecedentes expuestos en la audiencia de formalización, el accidente se registró a las 8:15 horas, cuando Carabineros estaba realizando labores de tránsito en el frontis del Colegio Alta Cordillera, específicamente en el bandejón central y vieron que un conductor de un vehículo Mazda chocó un furgón escolar que estaba estacionado en Diego Portales. Afortunadamente, minutos antes el tío del minibús había bajado a los niños y el accidente ocurrió en el momento que los estaba entregando en el colegio.

"Al concurrir personal policial, se percató que el imputado estaba en manifiesto estado de ebriedad, dado por su fuerte hálito alcohólico, rostro congestionado e incoherencia en hablar".

Otra identidad

El fiscal Luis Soriano expuso en la audiencia que el imputado, tras ser detenido, se identificó como Gonzalo, entregó una cédula de identidad y una licencia de conducir con ese mismo nombre.

Más tarde, a las 10.30 horas en la comisaría, cuando Carabineros estaba tomando declaración al conductor afectado, se presentó el hermano del imputado, quien le señaló a los carabineros que recibió un mensaje de voz del detenido, el cual le informó que estaba detenido por manejo en estado de ebriedad y que se hizo pasar por él.

Condenas

El imputado, que se identificó en la audiencia como Milton Mita Alvarez, de 27 años, el 24 de mayo del 2017 fue condenado por el delito de manejo en estado de ebriedad con inhabilitación de licencia de conducir por dos años, según expuso el fiscal Luis Soriano en la audiencia. Además, registra seis condenas por el mismo delito el 2016 y otra causa del 8 de febrero del 2017 por la misma razón.

El persecutor lo formalizó por dos delitos: manejo en estado de ebriedad y usurpación de identidad. Además, solicitó la prisión preventiva por considerarlo un peligro para la seguridad de la sociedad, sin embargo la defensa se opuso, con el argumento que su representado puede acceder a otros beneficios y el solo hecho de presentar condenas no significa que sea un peligro. La jueza Ana Sepúlveda decretó la reclusión nocturna.

Detectives de la Brigada Investigadora de Delitos Sexuales y Menores (Brisexme) de la PDI detuvieron a un estudiante universitario de 19 años, quien fue denunciado por golpear a su polola una joven de 18 años, madre de su pequeño hijo.

La víctima llegó a la Policía de Investigaciones a interponer una denuncia contra el agresor, con cortes en su brazo izquierdo, los que según su testimonio fueron causados por el imputado luego de arrojarle un frasco de vidrio.

Las indagatorias de los detectives establecieron que la mujer sufría agresiones físicas y sicológicas que se extendían hace un año y medio, tiempo que coincidía con la relación de esta pareja.

Asimismo, los oficiales policiales de la Brisexme constataron a través de un diagnóstico médico, que existía una correlación entre las marcas en el cuerpo de la mujer y los hechos denunciados.

El imputado fue formalizado por el delito de lesiones menos graves en contexto de violencia intrafamiliar y quedó con prohibición de acercarse a la víctima.

Definitivamente se les pasó la mano a tres amigos tras la celebración del triunfo de la Roja, ya que al intentar huir de Carabineros, casi chocan un carro policial en pleno carrete.

El hecho se registró ayer cerca de la una de la madrugada en el sector conocido como "Los bloques", ubicado en un sitio eriazo, en la calle Sergio Flores de la Población Miramar II, lugar donde llegan personas a beber alcohol estacionando sus autos.

Carabineros se encontraba realizando un patrullaje por el sector, cuando sorpresivamente se les acercó un auto color negro, cuyo conductor realizó una maniobra con la intención de colisionar al carro policial, para luego darse a la fuga a gran velocidad.

Según lo que expuso en la audiencia el fiscal Luis Soriano, dicho auto recorrió varias calles y luego se devolvió al sitio eriazo y estuvo a punto de volcarse.

Fue en ese momento que los uniformados se acercaron al vehículo Mazda modelo Demio y se encontraron con que el conductor estaba en manifiesto estado de ebriedad.

Al practicarle el alcotest, este arrojó 1.95 gramos de alcohol en la sangre.

Además se verificó que no portaba licencia de conducir y que nunca la había obtenido, ya que no aparece inscrito en los registros.

Revisión

Este sujeto iba acompañado de dos amigos, quienes al ser fiscalizados mantenían entre sus vestimentas cuchillos de tipo cocinero.

Los tres individuos fueron detenidos y ayer el conductor, Giulianno T.A de 37 años fue formalizado por el delito de manejo en estado de ebriedad. En tanto sus acompañantes Jaime E.F. de 40 años y Angelo A.M de 37 años, por porte de arma blanca.

Luego los tres imputados quedaron en libertad con la cautelar de firma mensual.