El sistema de asistencia a los referis (VAR) que se está aplicando en la Copa Confederaciones no ha caído en gracia a muchos de los actores de este apasionante deporte.

Lo sucedido en el partido de Chile con Camerún, con un gol anulado y otro que hubo que esperar para resolver si era o no válido, ha provocado reacciones.

El árbitro ariqueño Marcelo Barrera, afirma que "si bien esto hace justicia en algunas jugadas, le quita emoción al fútbol".

Para Barrera, funcionario público que los fines de semana se dedica al arbitraje, "el error es también parte del juego y en el caso de este sistema tecnológico, también queda a criterio del ser humano que está controlando las cámaras".

Para el goleador de San Marcos de Arica, Michael Silva, el sistema "quita la magia, la emoción y se demora demasiado la decisión quitando la esencia a este deporte".

Cuando hay dudas

Eso sí, el artillero celeste del campeonato pasado señala que lo ideal es que el sistema pueda ser utilizado "sólo para los casos en que haya que determinar si la pelota cruzó o no la línea de gol cuando haya dudas".

Para el caso del gol que se le anuló al delantero chileno, Eduardo Vargas, expresa que "me parece que ese gol era legítimo, pero lo bueno es que al final se ganó el partido".

Camilo Sáez, árbitro de vasta experiencia en Arica y a nivel nacional, opinó que la implementación del sistema de asistencia a los jueces "es muy desatinado por parte de la Fifa, no debiera intervenir en las reglas de juego".

Y tal como el goleador de San Marcos, el profesor de árbitros, estima que "la tecnología sólo debiera intervenir en el tema del gol, es decir , cuando hay dudas sobre si el balón traspasó la línea de sentencia del arco".