Camila Espinoza López

A diferencia de Garfield, que estresaba a su dueño con sus caprichos, los demás felinos domésticos podrían ayudar a combatir el estrés de sus amos. En Japón, por ejemplo, confían en estos animales para tener beneficios psicológicos y Ferray, empresa informática de Tokio, cuenta con gatos en su oficina, para que sus empleados se relajen.

Marcela Valenzuela, médico veterinario y académica de la Universidad Mayor, comenta que se han realizado diferentes estudios sobre cómo el tener un gato podría ayudar a la salud.

El ronroneo

"Los gatos se utilizan en personas que tienen un grado de discapacidad. También se los llevaba a lugares donde estaban los niños enfermos, asociados con cáncer. Y se ha observado que las personas están más relajadas (con ellos)", dice.

La veterinaria explica que el hecho de acariciar a un felino y oír su ronroneo resulta beneficioso y permite a combatir la ansiedad que puede padecer una persona: "Este sonido ayuda a que uno se relaje".

Ejercitar en compañía

Una opinión similar tienen en La Casa de la Gata Horacia, centro integral para gatos, donde los felinos reciben a los humanos caminando libremente y las personas pueden realizar distintas actividades.

"El estrés, la ansiedad y la depresión son padecimientos muy comunes. El ejercicio físico es una manera de combatirlos. Los gatos, flexibles y meditativos por naturaleza, son los compañeros perfectos para ello. Nuestros gatos participan en las clases de Kundalini Yoga, Hatha Yoga y Stretching", dice Pamela Gaete, socia del centro felino.

La representante de la institución destaca que "la gente disfruta de meditar con los gatos en las piernas o hacer ejercicios con ellos estirados".

Interacción

Gaete cuenta que en el recinto, ubicado en la comuna de Providencia en Santiago, han podido observar cómo la gente interactúa tranquilamente con los felinos que están en el lugar.

"Puedes ver a la gente en las mesas de la cafetería conversando con gatos en sus piernas; inconscientemente los acarician y ellos se dejan. Esa interacción natural transmite tranquilidad, sosiego y, definitivamente, te libera de la carga de estrés. Los gatos te reciben y te dan cariño como si fueran conocidos de toda la vida", recalca.

De acuerdo a Gaete "las terapias resultan mucho más efectivas con los animales, cuya presencia ayudaría a las personas a distraerse.

El centro fue inaugurado por los directores de Fundación Adopta, con el fin de acercar la experiencia felina a la gente, promover la adopción y tenencia responsable.

¿por qué un gato?

Por otra parte, la académica Marcela Valenzuela explica qué ventajas tiene decidir integrar un gato a la familia.

"Es un animal más individualista. Ocupa poco espacio, come mucho menos. No es necesario sacarlo a pasear. Los dueños tienen esa garantía, a diferencia del perro, que es más dependiente", comenta la veterinaria.

Además, señala que "los perros necesitan mucho más juego que los felinos, independiente de que el gato también juega".

Las necesidades

A pesar de que los gatos son mascotas más independientes, Valenzuela explica que no hay que olvidarse de que requieren ciertos cuidados.

"Uno debería ambientar el lugar para los gatos. No dejar la comida cerca del agua, porque así se estimulan más a tomar agua. Normalmente los gatos, en la naturaleza, comen en un lugar y toman agua en otro. Si se quiere que tengan un mejor nivel hídrico deberíamos separar el agua de la comida", explica la experta.

La especialista también señala por qué algunos gatos siempre quieren tomar agua directamente de la llave del lavaplatos. "Muchos gatos gustan de tomar agua en movimiento. Toman agua de la llave o algunos meten la pata para mover el agua, dentro del plato. Existen fuentes de agua que son estructuras que están conectadas o enchufadas en la electricidad y el gato se estimula". Además, es importante contar con lugares de juegos y una zona para dormir, recalca.

"Estrés, ansiedad y depresión son padecimientos muy comunes. El ejercicio es una manera de combatirlos. Y los gatos, flexibles y meditativos por naturaleza, son los compañeros perfectos".

Pamela Gaete, socia de "La Casa de la Gata Horacia""

Edad: Un año y medio. "Tengo dos gatos: Simón y Oliver. Nunca tuve mascotas cuando chica, pero tuve una inclinación hacia los gatos. Siendo joven, un amigo me regaló una gatita chiquitita y llegué a tener nueve gatos", cuenta Lucía López. La periodista relata que el año pasado fuimos a adoptar a mis dos gatos. Me pareció algo bonito. Siempre he creído que hay que adoptarlos de dos, porque se acompañan y juegan juntos. Es súper bonita la relación entre ellos".

Lucia López, dueña de los gatos y locutora de Radio ADN, cuenta que decidió volver a tener gatos por sus hijos. "Me di cuenta de que los niños lo necesitaban, sobretodo mi hija chica, que es fanática. De hecho, los dos gatos duermen con ella". La figura televisiva agrega que sus gatos suelen pelear, pero se quieren mucho.

Simón y Oliver, inseparables