Juicio de Nabila
Tiempo atrás nos impactó lo sucedido a Nabila, víctima de un ataque brutal que dejó lesiones físicas y psicológicas. La semana pasada, en varios canales nacionales y radioemisoras fue transmitida su declaración en detalle y fuimos expectadores de un nuevo acto de violencia.
Si bien las audiencias de juicio oral son públicas y la comunidad tiene la posibilidad de estar al tanto de lo que en ellas ocurre, hay una delgada línea entre informar, informarse y volver a victimizar a Nabila.
No está en duda su calidad de víctima, por tanto, hay que cuidar las distintas acciones y no transformar el proceso en un juicio en contra de ella. No está en duda la calidad de víctimas indirectas de sus hijos y familiares cercanos, por el impacto sufrido. Ellos leen diarios, escuchan la radio y ven televisión. Se debiera tener presente, entonces, que existe la posibilidad cierta de causar daño y/o agravar el ya existente en ellos.
En estos casos, es importante considerar la evidencia aportada por estudios nacionales e internacionales, que relevan el papel del sistema judicial y el trato recibido en él como un factor que podría ocasionar la experimentación de una segunda victimización.
Verónica Berroeta V.
Universidad del Desarrollo