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El joven científico apasionado por la genética humana

Su investigación trata sobre la "Adaptación Genética al Arsénico en la Poblaciones Andinas del Desierto de Atacama". Actualmente se encuentra en Chicago.
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M ario Apata (25) es un joven científico ariqueño que estudió en el Liceo Domingo Santa María y a quien siempre le interesaron las ciencias.

Estudió Antropología Física en la Universidad de Chile, luego realizó un Magister en Ciencias Biológicas en esa misma universidad. Este año, cuenta que se inició en el Doctorado de Genética Humana en la Universidad de Chicago.

"Actualmente me encuentro en el departamento de Genética Humana en la Universidad de Chicago profundizando más el tema de la evolución y genética en la exposición al arsénico de las poblaciones andinas".

Su tesis de pregrado fue una investigación sobre Camarones y cómo la población de este lugar ha sobrevivido a la exposición más alta de arsénico en América sin presentar emergencias epidemiológicas. "El arsénico provoca cáncer, abortos, lesiones a la piel. Mi idea fue investigar cómo han sobrevivido estas poblaciones que ni siquiera tienen agua potable a un ambiente tóxico. El tema surgió a partir de las conversaciones con Bernardo Arriaza (Director del Laboratorio de Bioarqueología del Instituto de Alta Investigación de la UTA), quien fue colaborador al igual que Mauricio Moraga".

Explica que cuando le contó a su tutor de tesis el tema que había elegido, lo felicitó, ya que las investigaciones respecto a ese tema eran casi nulas.

Investigación

La investigación científica de Mario trata cuando los primeros habitantes de la Quebrada de Camarones (pudiendo haber sido de la Cultura Chinchorro), hace aproximadamente 7 mil años atrás, tuvieron que sobrevivir en el desierto más árido del mundo, bebiendo de estas aguas ricas en arsénico.

"Desde esos primeros habitantes y durante cientos de generaciones bebiendo agua con altos niveles de arsénico, fue ocurriendo un proceso de selección natural de aquellos individuos que poseían un mecanismo protector al arsénico. Estos individuos fueron dejando como herencia a sus descendientes las "variantes genéticas protectoras", lo cual vemos reflejado en ese 68% en la población actual de Quebrada Camarones". "Los casos de adaptación genética en humanos son escasos en el mundo, y Quebrada Camarones es ahora uno de esos selectos ejemplos. Además, la adaptación al arsénico en Camarones es única en Chile, y sólo tiene un paralelo similar en América, a cientos de kilómetros en el altiplano argentino (Población de San Antonio de los Cobres)", explica sobre su trabajo.

El ariqueño dice que quiso realizar una investigación sobre la región porque es algo que le apasiona. "Estoy constantemente yendo a Arica, me gustaría volver. Bernardo Arriaza siempre me dice que es la zona ideal para los estudios de genética y la salud. Me gustaría hacer mi investigación del doctorado sobre un tema regional", adelanta el científico.