Con el gran sueño de ser un futuro crack, el pequeño Pablo Ossandón Molina, desea incursionar en el fútbol ariqueño o nacional y desde ya ha integrado con éxito la Escuela de Fútbol San Lorenzo de Arica.

Pablo nació en Bordeaux, el 18 de enero de 2007 y es hijo de José Ossandón Vásquez, músico ariqueño radicado en Francia, y de Magaly Molina, de nacionalidad francesa.

Según cuentan sus padres y profesores de la escuela de fútbol, desde pequeño le ha gustado practicar el fútbol y en 2012 comenzó a jugar por el club Castelnau de Medoc, equipo que representa a su ciudad del mismo nombre.

Cantera mundial

En 2013 fue llevado a jugar por el equipo de la ciudad de Listrac Medoc y cuando se encontraba en ese club el 2014 fue recomendado por varios entrenadores que lo veían jugar, y llamado a probarse por el FC Girondins de Bordeaux, misma institución donde se han formado grandes jugadores como Zinedine Zidane y Deschamps y una de las 15 mejores canteras del fútbol mundial.

Allí pasó las tres pruebas quedando entre los 10 jugadores seleccionados para integrar la sub 8, siendo esta ya su tercera temporada en donde ha jugado varios campeonatos y llegando, además , a ser goleador en algunos de ellos.

Durante su última visita a Arica tuvo la oportunidad de integrarse a los entrenamientos del club San Lorenzo de Arica, que dirige el entrenador Jaime Bunsen, participando en un torneo en Tacna y recibiendo muy buenas críticas de parte del profesor .

Hincha

Sus equipos favoritos aparte del FC Girondins, son la Juventus y San Marcos de Arica.

Para sus próximas vacaciones, en 2017 ha sido invitado a probarse en la Universidad Católica.

El entrenador de la Academia y Escuela de Fútbol San Lorenzo de Arica resalta que justamente la idea es ir formando niños y buenas personas sin importar nacionalidad.

Además, pone de relieve la importancia de las giras que realizan para jugar con otras academias.

Finalmente, como todo niño, Pablo tiene como sus grandes sueños en el futuro integrar equipos de primera división.

Pero, su sueño mayor es llegar a vestir la roja de todos.