Alcancías transparentes: la mejor forma de inculcar el ahorro en los niños
Mientras algunos expertos son partidarios de comenzar a inculcar conceptos sobre educación financiera desde los cuatro años, cuando los niños ya saben distinguir las monedas, otros proponen postergar la entrega de dinero a los escolares hasta que cumplan ocho años.
Jonás Romero Sánchez
En la pantalla, Elmo, uno de los personajes más reconocidos de la popular serie infantil Plaza Sésamo, intenta capturar monedas voladoras, con un pequeño frasco transparente.
El juego virtual, en apariencia simple, es parte de "Sueña, Ahorra, Alcanza", iniciativa enfocada en el fortalecimiento financiero de niñas y niños, y cuyo objetivo es ayudarles a adquirir habilidades y comportamientos financieros saludables.
A propósito de la campaña, apoyada por Fundación Chile y Metlife Foundation, La Estrella preguntó a expertos cuál es la importancia de la educación financiera a temprana edad y cuáles son las mejores formas de incentivarla.
¿cuándo comenzar?
Una de las dudas que surgen al mencionar el tema, es qué edad es la apropiada para comenzar a hablar del ahorro. Para Paloma Barrios, analista de estudios de Fol.cl, "lo ideal es cuando comienzan a diferenciar las monedas, cuando, en general, empiezan a pedir dinero, más o menos, a los cuatro años".
Y es que, según la especialista, es aproximadamente a esa edad cuando los chicos ya manejan la relación causa-efecto, con lo que podrán comprender que el ahorro o el "guardar", puede rendir frutos más adelante.
¿dar o no mesada?
Para Paloma Barrios, las mesadas constituyen una buena forma de incentivar el ahorro: "Para los más pequeños, es recomendable que les regalen una alcancía, idealmente que sea transparente, para que vayan viendo que el dinero va creciendo y se le haga entender que, depositando el dinero en dicho lugar, el día de mañana podrá lograr cumplir su objetivo".
Expertos han señalado que, más importante que el monto de la mesada, es que tanto la cifra como la frecuencia de esta se mantenga en el tiempo. "Eso ayuda a fomentar de mejor manera el hábito", sostiene Barrios.
Mientras, la psicóloga de la Universidad Andrés Bello, Mónica Miranda, ha sostenido que una buena edad para comenzar a dar dinero a los niños son los ocho años, ya que tienen más noción de qué hacer con los recursos que se les dan.
Importancia integral
Según explica Ana María Raad, directora del Centro de Innovación para Educación de la Fundación Chile, uno de los aspectos más importantes de la educación financiera es que esta influye en el desarrollo de los niños a futuro.
"La educación financiera no son sólo contenidos financieros, es el desarrollo de habilidades que definirán cómo te relacionarás como ciudadano, como miembro de una comunidad, y eso debe trabajarse desde temprana edad", sostiene.
La especialista destaca que la OCDE (organización que reúne a las naciones más ricas del mundo, y a la cual Chile pertenece) realiza mediciones sobre la educación financiera en los países: "Este ítem es tan importante, que la OCDE lo utiliza como un indicador que influye en el nivel de desarrollo de las naciones".
Usar internet
El programa "Sueña, ahorra, alcanza", dispuso un sitio web con material interactivo y audiovisual para incentivar el aprendizaje de los niños, con los personajes de Plaza Sésamo.
El sitio es suena-ahorra-alcanza.plazasesamo.com/chile, y todos los materiales están disponibles de forma gratuita.
"Es recomendable regalar una alcancía, idealmente transparente, para que vayan viendo que el dinero va creciendo".
Paloma Barrios, analista de estudios Fol.cl., Ana María Raad, directora de innovación en Fundación Chile."
"La educación financiera no son sólo contenidos (...), es el desarrollo de habilidades que definirán cómo te relacionarás como ciudadano"."
Para Ana María Raad, es común que los padres intenten compensar la falta de tiempo o atención comprando los regalos que les piden sus hijos, algo que no ayuda a que estos pongan en perspectiva el valor del dinero. "La idea es que los adultos puedan explicarles el por qué no se puede comprar todo en cualquier momento", dice.
Raad complementa con que es fundamental, para el desarrollo integral de los niños, el ser incluidos en conversaciones y decisiones sobre el presupuesto familiar: "El que desde chicos se familiaricen con el costo de las cosas, y más aún, el sentir que sus opiniones son consideradas, generará en ellos confianza, límites y autonomía".
Incentivar el ahorro con objetivos
Para los especialistas, una de las mejores formas de incentivar la idea del ahorro es hacerlo a través de un objetivo definido. Por ejemplo, proponerse comprar un juguete en específico, o una camiseta de Alexis Sánchez. "Con esto, los niños tendrán una recompensa material al final de este esfuerzo", dice Paloma Barrios.