Con la marcha fúnebre de fondo, los trabajadores adheridos al paro de la Asociación Nacional de Empleados Fiscales (Anef) y la mesa de empleados públicos, marcharon por última vez, luego que el Ejecutivo despachara definitivamente el proyecto de reajuste del 3.2%.
Con la manifestación 'de luto' se dio término a la paralización de los principales servicios, que durante tres semanas, suspendieron la atención o la entregaron con turnos éticos a sus usuarios.
Los asistentes a la marcha llegaron vestidos completamente de negro, con flores, pañuelos blancos y un ataúd- en el que descansaba el famoso reajuste. La marcha se inició en el Parque Carlos Ibáñez y culminó en el frontis del Gobierno Regional.
El presidente regional de la Central Unitaria de Trabajadores (CUT), Osciel Contreras manifestó que la aprobación del 3.2% de reajuste para el próximo año es insuficiente e insatisfactoria para los empleados públicos, que en un comienzo peleaban por un 7%.
"Con esta marcha manifestamos nuestro descontento. Realmente se luchó por cambiar la postura del Gobierno, con un reajuste mayor para los trabajadores", explicó.
Huevos y tomates
La indignación se sintió en la manifestación, ya que al llegar al frontis del Gobierno Regional, los marchantes lanzaron tomates y huevos al recinto.
Del mismo modo, las pancartas y los gritos en contra de la presidenta Michelle Bachelet y su Gobierno, no se hicieron esperar.
"Los funcionarios públicos plegados desde el primer día, han hecho de esta movilización algo único. Demostramos que un porcentaje alto se unió y estamos satisfechos porque luchamos por la dignidad hasta el final", puntualizó el dirigente.
El proyecto de ley otorgará un bono especial a los funcionarios públicos, de $114.000 para las remuneraciones de hasta $550.000 y otro de $35.000 para trabajadores que perciben entre $550.000 y $2.345.060.
Con el término de las movilizaciones se espera que la atención en los diversos servicios públicos se reanude hoy con total normalidad.