Secciones

Me gusta la poesía y me gusta declamar, ¿pero qué se siente?

E-mail Compartir

Aprenderse un poema no es complicado, basta memorizarlo y parte del trabajo está logrado.

Salir al escenario es otro cuento, porque se sienten cosquilleos en el estómago y nervios al momento de declamar.

Esto es lo que sentí al momento de participar en el Tercer Concurso de Declamación organizado por mi colegio, en el cual participaron 6 colegios más… pero mi historia comienza así:

Para la primera etapa de clasificación, le pedí ayuda a mi mamá para practicar. Las primeras veces me ponía nervioso y mamá me decía: "hijo, tú ya conoces cómo es, no te pongas nervioso" y yo le contestaba que iba a haber mucha gente. En la segunda y tercera vez que practiqué me salió mejor y mi mamá me dijo: "¿ves? así tienes que declamar" y yo le dije que ya estaba preparado y mi mamá me contestó que practicara una vez más y me salió muy bonito. Mi mamá me felicitó y me dijo que ya estaba listo para la primera etapa. El día que se hizo la primera etapa yo estaba nervioso y pensé que no podría pasar a la segunda ronda, yo me di ánimo y cuando me llamaron respiré profundo y comencé a declamar. Los profesores que estaban de jurados me aplaudieron.

Días después me avisaron los resultados de la primera etapa y me puse muy feliz porque había clasificado a la segunda etapa. Se lo conté a mi mamá y me felicitó y después me dijo tenemos que seguir practicando y lo hicimos durante dos semanas y a la tercera ya estaba preparado.

El día de la segunda etapa fue en el Aula Magna de la Universidad de Tarapacá (Campus Velásquez) y me puse un poco nervioso y mis profesores Claudia Paredes, Paulina Hatte y David Muñoz me daban mucho apoyo. Cuando me tocó salir me llamaron con el micrófono y yo me puse nervioso… declamé, pero me salté unas estrofas y seguí. Después cuando me mandaron a sentar yo me puse nervioso y empezaron a premiar al primer lugar, al segundo lugar y al tercer lugar y después escuché que el jurado quería premiar al esfuerzo con el galardón de oro y me llamaron al escenario y yo me puse muy feliz, el público me aplaudió de pie.

Estoy en el colegio desde Kinder y pertenezco al Programa de Integración Escolar desde 2° básico. Siento que la ayuda de ellos también fue importante porque me enseñaron muchas cosas de Lenguaje y Comunicación y me están apoyando en Matemática. También me han ayudado para el Concurso de Declamación, son un gran apoyo.

Volvería a participar el otro año en este Concurso de Declamación porque yo viví una bonita experiencia y la recomiendo a todos los alumnos y colegios.