Cerca de 46 millones y medio en especies incautó Carabineros de la Tenencia Chungará al interior de un bus de la empresa "Litoral", que fue controlado en el complejo fronterizo, a la altura del kilómetro 185 de la Ruta Internacional 11-Ch y que transportaba un contrabando de celulares y accesorios para los mismos equipos.

Tras una minuciosa inspección, la mercancía fue descubierta, en la parte superior del bus, entre los compartimentos de equipaje y el aire acondicionado, donde permanecían numerosas cajas, que contenían 137 celulares y 252 piezas de cables, cargadores y baterías.

El millonario cargamento, no contaba con documento alguno que respaldara su compra, procedencia y propiedad, reconociendo posteriormente, un pasajero de nacionalidad boliviana, que transportaba la mercancía para su comercialización en el vecino país, razón por la cual fue detenido en forma inmediata por Carabineros por el delito de fraude aduanero.

Al igual como ocurre en el programa del "Tio Emilio" atrapado en su propia trampa, carabineros de la Sip de la Tercera Comisaría hicieron pasar un mal rato a un ladrón, quien robó un celular y después, el descarado llamó a su víctima para pedirle dinero y de esta forma le devolvía su teléfono móvil. Nunca se imaginó este delincuente apodado "El Lagarto" que quienes irían a buscar el aparato no sería su víctima sino carabineros y así lograron detener a dos sujetos.

Los hechos transcurrieron al interior del Terminal Internacional, en Avenida Diego Portales, donde la secretaria de una agencia de buses, salió a dejar una bolsa de basura en el contenedor que se encuentra frente a su lugar de trabajo, momento en el cual, fue abordada por un hombre joven, quien para distraerla, le pregunta si vende cigarrillos, luego se percató que le habían sustraído su celular.

Ante la pérdida del equipo, la dueña comenzó a llamar insistentemente, para recuperar por lo menos el chip, ya que el celular no era de gran valor monetario, sin recibir respuesta alguna.

Una hora más tarde, la víctima relató a personal de la SIP, que recibió un llamado de dos sujetos que a cambio de 30 mil pesos, pretendían devolverle su celular. Ante la negativa de la dueña por ser un monto muy elevado, los sujetos insistieron, pactando una cifra menor, la que debía ser retirada por un individuo en la misma oficina, y bajo la amenaza de no informar a Carabineros sobre los hechos.

Esta transacción no resultó, quedando acordada una segunda en el sector de Bolognesi, donde esta vez concurren policías encubiertos de la Sip, logrando la detención del primer y segundo individuo.

Según lo informado por Carabineros, ambos fueron puestos a disposición del tribunal y fueron formalizados por el delito de receptación.

Es como para no creerlo, un ladrón apodado "El Cantifla y que también es conocido en el mundo delictual como "El doméstico" (luego conocerá los motivos), se robó nada menos que un camión que prestaba servicios de traslado de muebles de una conocida multitienda; se llevó todos los nuevos artículos que estaban listos para ser entregados a sus dueños.

El conductor de la máquina realizó un alto en su domicilio particular, ubicado en calle Nespolo, pero al momento de salir, se llevó la ingrata sorpresa que el camión no estaba donde lo había dejado estacionado,

El hombre muy desesperado acudió a la Primera Comisaría de Carabineros a interponer la denuncia por robo y fue así que la investigación quedó en manos de la Sección de Investigaciones Policiales (SIP). Realizaron un recorrido por el sector y encontraron el camión, pero este estaba vacío. Según el conductor tenía que entregar 2 refrigeradores, una mesa de comedor y un congelador.

Luego los policías observaron que un sujeto estaba vendiendo un congelador en una vivienda, solicitaron autorización y encontraron en dos domicilios las especies. Vendió los artefactos a sus familiares y la mesa a un amigo, es por eso que es conocido como "El doméstico". Si bien no lograron dar con el paradero de este ladrón, si fue detenida una de las personas que compró una de las especies. Ella se llevó la peor parte, pasó la noche en la comisaría y fue formalizada por el delito de receptación. Todo por comprar artefactos robados; lo barato cuesta caro.