Alergias primaverales: ¿Mito o realidad en Arica?
Médico aseguró que en nuestra ciudad es más frecuente la rinitis perenne causada por polvo o ácaros.
No es extraño toparse en esta época del año, con personas que viven congestionadas y con los pañuelos desechables como fieles compañeros. Estornudos por doquier y el lagrimeo de los ojos suelen ser parte de las famosas alergias de primavera.
Pero en Arica ¿existe realmente este cuadro estacional? En una ciudad que se reconoce eternamente primaveral, esta condición médica parece tener más de mito que de realidad.
Según el doctor Juan Rojas, subdirector médico del Servicio de Salud de Arica, en esta ciudad no se ven este tipo de alergias porque no hay un cambio de estacionalidad mayor ni hay una cantidad importante de plantas con polen.
"En otras zonas del país como en Santiago, se siente fuertemente el cambio de estación por la gran existencia de polen en plantaciones como el plátano oriental. Sí tenemos otros alérgenos como el pasto y los olivos, pero en general, el problema no tiene el contenido de estacionalidad tan marcado como en otras ciudades".
El médico señaló que existe una rinitis perenne en las personas alérgicas que en nuestra ciudad está dada por el polvo y sus ácaros. Esta rinitis se ve durante todo el año y la complicación más frecuente es la sinusitis.
Tratamiento
Muchas veces una alergia se confunde con un resfriado común, por lo que es muy importante poner atención en los síntomas. Uno de ellos, por obvio que parezca, es que la alergia no ocasiona fiebre.
Otro dato importante es que la rinitis es una condición que afecta al 20% de la población y es más frecuente en niños.
"Las personas pueden optar por vivir con su rinitis y tener una calidad de vida no muy buena o realizar un tratamiento que consiste en despejar los alérgenos que uno tiene en la nariz", detalló el doctor.
En este sentido destacó la importancia de un aseo nasal con abundante agua o con suero fisiológico, que provocará que se disminuya la cantidad de alérgenos que entran por las fosas nasales.
"El tratamiento para un alérgico diagnosticado se basa en la administración de antihistamínicos. Estos antes producían hambre y sueño, pero hoy en día tienen menos efectos secundarios. También existen los corticoides nasales en casos de crisis. Pero cualquier indicación no es mágica".
Rojas aseguró que los síntomas disminuyen conforme avanza la edad, ya que el cuerpo deja de sobrereaccionar frente a los estímulos que ocasionan el malestar.
Finalmente, el profesional de la salud destacó que los antihistamínicos e inhaladores forman parte de la canasta disponible en los distintos consultorios de la región.