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La dulce revancha en piso de tierra de los ramaderos del 18 Chico

Al contrario de cómo les fue al pie del Morro, en San Miguel, la cumbia, la chicha y la guatia dejaron a todos felices.
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Berta dice que desde los 17 años va a las ramadas de San Miguel de Azapa. No quiere decir su edad, pero igual deja caer que lleva más de 20 en las fondas que se realizan en la cancha principal de esa localidad rural, donde el viernes, la noche del sábado y la tarde del domingo se disfrutó de los grupos tropicales Fuerza G, Tony y su Grupo Amor y Alumbras, de Perú; todo pasando.

El relato de esta clienta era el reflejo de lo que ocurrió los dos días del fin de semana pasado en el poblado ubicado en el kilómetro 12 del valle, donde tal como el título de una portada que no se escribe nunca, "los ramaderos sacaron cuentas alegres".

A diferencia de las del pie del Morro, esta vez las agrupaciones de fonderos pudieron respirar más tranquilos, por la gran cantidad de gente que llegó, más que todo, la noche del sábado.

Piso de tierra, baños habilitados al medio de los puestos y en un establecimiento del sector, y mayoritaria asistencia de azapeños, peruanos y bolivianos, por lo menos el 18 Chico no fue tan chico para los locatarios que se instalaron en la localidad rural.

"Por lo menos esta es una dulce revancha. Si en Arica no nos fue tan bien, creo que ahora estuvimos mejor", explicó Tomás, del local Larita, que pasado el mediodía, ya tenía listas las piedras y el socavón para lanzarse con la primera guatia.

"Acá la mayoría de gente que viene, es de este sector, del valle. También llegó harto extranjero peruano y boliviano, pero como le digo, las familias que más llegaron fueron de las localidades rurales", remató.

¿qué había?

Aparte de los bien tradicionales locales de atención donde el anticucho, la sopaipilla, la cerveza y el terremoto ya son parte de la casa, también hubo varios puestos con bailable cumbianchero incluido, y hasta por el medio de unos de los pasillos apareció una simpática guatia, como para que el asunto patrio tomara forma rural y más autóctona.