En los últimos días, la historia del economista Rafael Garay, ha dado varias vueltas. Primero ocurrió la denuncia por presunta desgracia presentada por sus familiares, el 14 de septiembre, luego de que el economista desapareciera mientras cumplía con un supuesto tratamiento oncológico, en Francia. Luego, sería la propia clínica gala quien desmintiría que Garay haya ingresado a sus dependencias.

Ese último hecho gatilló sospechas en Chile, donde al menos 16 inversionistas se han querellado en su contra por presunta estafa.

De acuerdo a las pesquisas de la PDI, la ruta que Garay ha seguido en este tiempo, es llamativa: en dos semanas Garay dejó París para dirigirse a Tailandia, luego a Holanda y, finalmente, Rumania, donde el Ministerio de Relaciones Exteriores informó que Garay solicitó un certificado de soltería ante el consulado chileno.

El subprefecto de la Interpol de la PDI, Ricardo Quiroz, dijo a La Tercera.cl que se emitió "una alerta amarilla por una persona desaparecida", pero que "no tiene ningún encargo judicial".