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El desafío del respeto

No es difícil darse cuenta que, por estos días, el respeto, el mínimo respeto por quien está al lado o por la sociedad en su conjunto, está quedando de lado. En nuestra ciudad es cuestión de advertir día a día, de manera cotidiana, ciertas conductas. Y es que no hay que olvidar lo importante que es la tolerancia y la comprensión de la diversidad en una sociedad que con el paso del tiempo, tiende precisamente a eso, ser mucho más diversa, plural y heterogénea. Sin embargo, los hechos muestran que no necesariamente estas características hagan que el respeto como valor sea mucho más reconocido.

El caso es que el respeto es muy amplio, tiene muchos alcances, y en ese sentido, la falta de este valor ha significado una serie de padecimientos a nuestra sociedad donde los derechos y deberes muchas veces se encuentran de frente y hay un contrapeso poco sano para la anteposición de muchas prerrogativas que a veces, terminan por deslegitimarse cuando pisotean los derechos de los demás o incluso otros deberes.

El respeto como un derecho de una persona, no es reconocido en muchos casos, en que debería ejercerse como un deber. Lamentablemente las consecuencias son casi hasta cotidianas.

Problemas de respeto con la autoridad, en las escuelas, la imprudencia al conducir, el no respetar un turno o un lugar en una fila, los derechos de personas mayores o de mujeres embarazadas y así podrían sumarse muchos ejemplos más.

Todo esto deja en evidencia lo importante que es trabajar como sociedad para poder recuperar un concepto y un valor tan extraviado como es el respeto, incluso con campañas de este tipo.

Y es que pareciera que muchos confunden el ser abiertos o vanguardistas, o erróneamente audaces y malamente rebeldes, con el hecho de, por ejemplo, no saludar, ceder el asiento a un adulto o adulta mayor, no respetar una luz roja o un cruce de peatones.

Se piensa que es de "retrógrados" tener estas conductas y se olvida que para que las sociedades crezcan y tengan un mínimo orden, es preciso respetar estos aspectos básicos, aquellos que nos hacen vivir en comunidad.

"Pareciera que un valor tan básico va quedando en el olvido, reemplazado por un egoísmo creciente"