En pleno Paseo 21 de Mayo una pareja de argentinos disfrutaba su mate tranquilamente. Es que la confianza que le tienen a su selección es tanta que no mostraron mucha preocupación.

"Tenemos que ganar 2 a 0, o 3 a 1, no importa quién meta los goles. La idea es ganar sí o sí esta final", dijo antes del partido Denis Garcés, un argentino que está de paso por Arica junto a Elisa Massari. Al igual como ellos la mayoría de sus compatriotas al ser consultados no tenían dudas. Es que hay copas que avalan a la selección Argentina, sin embargo los últimos años se le han escapado algunos títulos. Por eso la misión era ganarle a Chile o agregar otra derrota a la lista.

Apesar de que la selección chilena se iba a jugar la final de la Copa Centenario, los ánimos por comprar cotillón no eran de los mejores durante la mañana. Sin embargo ese panorama cambió con el pasar de la tarde cuando todos estaban en busca de la polera de la selección en la Feria Dominicial, donde los precios eran desde los 9 a 10 mil pesos la camiseta adulto y de 5 a 8 mil pesos para niños.

"Habían camisetas de hasta 12 mil pesos por ahí, estaban muy caras, cuando lo normal es de 4 a 5 mil pesos como mucho", dijo Richard Valdés.

Por otro lado el cotillón estaba más económico y los precios fluctuaban entre los 2 a 3 mil pesos los gorros; vuvuzelas a 500 pesos y mucho más. Otra de las novedades eran las banderas con la foto de la selección, las que se vendieron a 2 mil pesos.

Una de las comerciantes que se las gritó todas vendiendo cotillón fue Ángela Pardo, que se pintó hasta las uñas con la bandera de la selección para apoyar a La Roja.

Una de las cosas que sí fue muy demandada durante las primeras horas de ayer, fueron las carnicerías que fueron asediadas por el público que fue en busca del mejor corte para la previa del partido entre Chile v/s Argentina.

Es que para los ariqueños no hay partido sin cotillón, unas buenas cervezas y una parrilla para celebrar en familia o pasar las penas de esta final que fue esperada por muchos.

Wendy Oviedo no se ha perdido ningún partido de la selección chilena en la Copa América de los Estados Unidos.

Ella se ha convertido en la musa y cábala del equipo y se ha sacado fotos con todas las figuras.

La ariqueña radica hace muchos años en Nueva York, donde está casada y trabaja como personal trainer.

Asimismo, ella se convirtió en la madrina de muchos ariqueños que llegaron a alentar a la Roja de todos.

Entre ellos, estuvo el ex jugador de San Marcos, Edgardo López.