Nunca pensó que su vida iba a dar un giro en 180 grados y menos de un momento a otro. Que pasaría de ser una estudiante universitaria como cualquier otra a una gran estrella del Internet. Katherine Bastidas, menos imaginó que con su canal de YouTube sobre tutoriales de maquillaje, superaría los 100 mil suscriptores y que, a causa de eso, ganaría un importante premio que la llevaría a pasear por las calles de Nueva York.

"Me recuerdo muy bien que el primer video que subí no fue un tutorial de maquillaje, fue un 'arréglate conmigo', pero sin voz. Le puse sólo música de fondo. Ahí mostré como me maquillaba para ir a la universidad. La gente que lo vio comenzó a decir: ¿Por qué no habla?, ¡Saca la voz! Yo no sé como fue creciendo el canal, pero al instante tuvo muchas visitas", señala.

De ese momento clave, ya han pasado cerca de dos años y medio. No obstante, aclara que su pasión por las sombras, rubores y labiales nace mucho antes, cuando era sólo una niña, ya que su madre es cosmetóloga. "El gusto por el maquillaje siempre lo tuve desde chica. En mi casa siempre hubo. Pese a no tener hermana, siempre el tema lo vi reflejado en mi mamá", explica.

Cuando cursaba tercer año de diseño gráfico, decide exponer su gran pasión por el maquillaje. ¿Dónde?, fue la pregunta. Sin embargo, tras varias opciones decidió que lo ideal sería YouTube. "En la universidad me enseñaron a editar, a hacer fotografías y a manejar el tema de la iluminación. Además mi papá ya me había comprado una cámara y tenía mucha inspiración en cuanto a maquillaje, obviamente, de otros países. No de Chile. Así que me dije: ¿Por qué no? Así comenzó todo", relató.

El vuelco

Poco a poco la vida de Katherine fue cambiando. Cada día sus videos se iban viralizando más rápido y, por consecuencia, iba obteniendo más seguidores. Esto produjo que su canal fuese tan exitoso que, incluso, las grandes marcas de productos de belleza pusieron sus ojos en ella.

"Cada vez que un canal crece, el interés de las marcas también va aumentando. A una marca le conviene más una persona que tiene 100 mil suscriptores que otra que tiene menos. En especial si son marcas que son mundialmente conocidas. Por ejemplo, a mí me contactó Maybelline que está alrededor del mundo, porque las personas que me ven no son sólo chilenos, así que les conviene", explica.

Cuando los auspiciadores, los regalos y descuentos en tiendas se hicieron rutinarios, Katherine, se dio cuenta que su canal era rentable y por eso cambió su pensamiento, se dijo: "Ahora esto es un trabajo que debo cuidar,