La naturaleza aún nos sorprende
A estas alturas de la historia, muy pocas cosas nos sorprenden como lo hace el descubrimiento de nuevas especies. Durante 2015 se publicó un listado con 10 especies tan sorprendentes como los lugares donde fueron halladas por primera vez y aun así, existe la creencia que es difícil toparse con algo nuevo al respecto.
La Universidad de La Serena hizo público a mediados de mes, el reporte que daba cuenta del hallazgo de una nueva araña en la zona de la Isla Chañaral de Aceituno, en el límite entre las regiones de Atacama y Coquimbo. El hecho fue dado a conocer a la comunidad científica luego de un exhaustivo estudio con la finalidad de poder describir al artrópodo que viene a engrosar la lista de biodiversidad.
Este hallazgo es de gran importancia para el país y una muestra clara del efecto que puede tener el hecho de que una zona se resguarde de la presencia humana, en beneficio de la naturaleza, como es el caso de esta isla. Además, en el pasado fue poco visitada por lo complicado de su accesibilidad. La isla Chañaral forma parte de la Reserva Nacional Pingüino de Humboldt que es administrada por la Conaf. Es la más grande de un conjunto de islas cercanas a la costa donde anidan los pingüinos que requieren de protección junto a su ecosistema por hallarse en peligro de extinción.
En medio de ese aislamiento la Cyrioctea islachanaral (como fue bautizada científicamente), tiene una historia común con otras arañas que en la actualidad viven en África, lo que otorga más valor al descubrimiento, porque su parentela con seres tan pequeños que viven al otro lado del planeta solo se explica, en que al momento en que apareció esta especie, América y África todavía estaban unidas en un solo continente.
Este descubrimiento debe llevarnos a reflexionar respecto al cuidado que le estamos dando a nuestros ecosistemas, el respeto que tenemos por la biodiversidad y el aporte que cada uno de nosotros podemos hacer en lugares tan delicados como el Humedal de Lluta, los bofedales del interior o nuestros parques nacionales. Nuestra intervención puede afectar a toda una especie.