Para muchos ariqueños es común ya la presencia de extranjeros que han hecho su hogar en Arica o simplemente están de paso.

Sin embargo, parte de ellos han tenido que atravesar todo tipo de situaciones y malos momentos, solamente motivados por cumplir el sueño de una vida mejor.

Uno de estos casos es el de Ana Guzmán Fortuna, de 36 años, nacida en República Dominicana. Ella ingresó ilegalmente a Chile, hace cinco años, caminando por la línea férrea apoyada por coyotes o mafias, que existen en Tacna, dedicadas a ingresar personas indocumentadas. Primero intentó hacerlo legalmente, a través del Complejo Fronterizo de Chacalluta, en tres ocasiones.

"Pese a que en ese año no pedían visa, los funcionarios de Extranjería me devolvían a Santa Rosa, y en más de una ocasión me dijeron si venía a trabajar en un club nocturno. Tras eso decidí hacerlo de manera ilegal, ya que no había otra alternativa", explicó Ana Guzmán, digitadora computacional que dejó, en su natal localidad de Santiago Rodríguez, en la isla caribeña, a sus tres hijos, los cuales no ha vuelto a ver, aunque sí mantiene contacto a través de las redes sociales.

Hoy su situación como mujer migrante está en nada. Lleva cinco años firmando en la PDI y no ha podido regularizar su estatus.

Tiene orden de deportación vigente, pero se niega a salir de este país, pues aquí ha pasado las buenas y malas, hasta iniciando una relación amorosa- Hoy sólo piensa en traer a su hija Paola, de 15 años, desde la isla.

Sobre las mafias de coyotes Ana explicó que estas trabajan desde Ecuador hasta Chile.

"A mí me contactaron en República Dominicana desde Ecuador. Al llegar a ese país, al cual no necesitas visa, nos trasladamos a la frontera con Perú, donde tuve que pagar para pasar ilegalmente y cruzar todo el país. Luego en Tacna comenzó la odisea, ya que finalmente tuve que pagar US300 dólares a un grupo de personas dedicadas a ingresar personas indocumentadas", detalló.

La migrante aseguró que las mafias están en el Terminal Terrestre de Tacna. "Ahí te esperan personas que al verte se acercan y comienzan a ofrecer cosas y pintarte maravillas", aseveró.

Luego sitúa el relato en el paso fronterizo, donde los coyotes le prometieron que la esperarían en la carretera cercana al aeropuerto de Chacalluta.

Sin embargo, el grupo, entre ellos una mujer, desaparecieron en la oscuridad del desierto, a metros de la frontera con Chile. "Caminé junto a un hombre de Haití y cuando llegamos cerca del aeropuerto, donde ya no podía caminar más, no estaban los coyotes, como estaba pactado. Luego divisé una camioneta que era de Carabineros, les levanté las manos y pedí ayuda", relató la ciudadana dominicana. Tras eso fue detenida y entregada a Extranjería de la PDI.

"Cuando me dejaron libre, cogí mi maleta y estuve caminando y llorando por largas horas sin saber qué hacer", agregó.

Pero eso fue el comienzo de una larga espera, llenas de amarguras, por la lejanía con sus hijos y familiares, y también con momentos de felicidad, al encontrar a su pareja chilena.

"Hoy estoy de brazos cruzados, no puedo casarme con mi pareja, ya que necesito un timbre en mi pasaporte, cosa que aún no logró hacer. En estos momentos estoy con una orden de deportación y he tenido muchos obstáculos", enfatizó la mujer.

Ana trabaja en labores de aseo, pero en su país lo hizo como digitadora (computacional) y algún día espera poder estar en regla y vivir en esta tierra.

Sobre el trato de los chilenos, esta esforzada madre, dijo tener una buena impresión "aunque como en todos lados hay personas malas que desean aprovecharse", subrayó.

Ayuda

Ana está recibiendo el apoyo jurídico de la ONG "Tú también tienes derechos", a través de la abogada Francisca Buitano.

"La ONG la está asesorando jurídicamente y apoyándola en la tramitación de su recurso de reconsideración, que permitirá resolver su situación en el país.

Se trata de un recurso administrativo, donde finalmente quien define es el subsecretario de Interior", explicó la representante de "Tu también tienes derechos".

Buitano adelantó que, "se trata de un caso emblemático, ya que realmente Ana la ha pasado muy mal. Por eso haremos gestiones en Santiago para que vean su caso".