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Recomendaciones para tener un sueño placentero en vacaciones

¿Las altas temperaturas te significan un problema a la hora de ir a dormir? Aquí te damos unos tips.
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Vueltas en la cama de un lado para otro, sábanas que se adhieren a la piel, la tibia humedad y un denso ambiente son las asfixiantes sensaciones que cada noche impiden conciliar el sueño a miles de personas en la región.

Y claro -a no ser de que padezca insomnio-, la respuesta a estas desagradables sensaciones se deben en gran medida al hecho de que las altas temperaturas del verano -las que ayer llegaron a alcanzar 24°C- han intervenido considerablemente en el proceso de sueño de las personas, dificultando así su descanso y, a la larga, su salud.

Recomendaciones

Teniendo ya en cuenta lo importante que es el sueño para nuestra salud física, emocional y sicológica, el director de la carrera de Kinesiología de la Universidad San Sebastián , Cristian Contador, entrega una serie de consejos para ponerlos en práctica durante las vacaciones.

Primero, se recomienda dormir entre 7 y 8 horas es lo ideal para un adulto, durante este tiempo las posiciones adoptadas pueden ir cambiando, pasando también por distintas fases del sueño. Recordemos que la posición más óptima es de lado, con caderas y rodillas flectadas, porque no causa un impacto en la columna vertebral, manteniéndola relativamente en la posición neutra, lo que permitirá lograr que los tejidos que la componen puedan recuperarse del estrés diario.

También hay otras formas, por ejemplo, de espaldas, pero genera cierto estrés en la columna lumbar y cervical, siendo la última la que es más afectada al no poder mantener la cabeza mirando hacia el frente, ya que está girada hacia un lado, provocando contracturas musculares que se traducen en lo que la gente identifica como "tortícolis". Algo muy parecido pasa con la posición boca abajo, que es la menos recomendada.

Vacaciones

Durante las vacaciones las personas cambian casi todas las condiciones que influyen en la obtención de un sueño placentero. La mayoría de las situaciones que tienen que ver con el estrés del año pueden verse solucionadas durante el merecido descanso, sin embargo, el dormir en otras superficies puede afectar físicamente.

Ante el cambio de superficie las personas deben elongar y/o moverse antes de dormir y al despertar. La idea es que la rigidez en la columna provocada por el estar quieto varias horas tenga el menor impacto. En caso de acampar, el riesgo de sufrir molestias es mucho más probable, por lo que se debe elegir una superficie llana y con el mínimo de irregularidades, mantener la ventilación y optar por un colchón, realizar pequeñas rutinas de movilización y elongación de la columna vertebral antes y después de dormir.