N o era de la Municipalidad de Arica, ni tampoco del administrador de la página Arica Injusta Realidad.

Varios ciudadanos se preguntaban quién lo había instalado y, sobre todo, por qué lo dejaron encadenado y con un candado, como los condenados de las novelas de Alejandro Dumas.

Sin embargo, el misterio del basurero "castigado" de Maipú con Blanco Encalada, que también se viralizó por la red, fue aclarado por el mismo autor de la iniciativa, quien aunque no quiso proporcionar su identidad, se remitió a indicar que era el administrador de un nuevo restaurante del sector. "Era una necesidad. El centro es una asquerosidad, con el piso todo sucio. Le puse candado de lo contrario se lo robarían", confesó. Para ello, utilizó la base de un basurero municipal que alguna vez, mucho tiempo atrás, estaba allí dispuesto para recibir los desperdicios de los peatones.

El pequeño empresario pintó un tambor metálico de verde y así volvió a haber basurero en el sector .

1 tarro pintado de verde reemplazó al que alguna vez puso allí la municipalidad.