Bajo el lema "Recibir la Navidad con Villancicos", más de 600 alumnos del North American College (NAC) entonaron Villancicos en el Parque Vicuña Mackenna, donde participaron niños y niñas del nivel medio mayor a kínder del establecimiento educacional.

Cada año, en estas fechas, el NAC organiza este evento navideño que ya es una tradición en la institución educativa.

En la oportunidad, los menores entonaron 11 villancicos, clásicos como: Merry Christmas, Santa Clauss llegó a la ciudad, Los Reyes Magos y el infaltable Burrito Sabanero, villancico con el que dieron término a la jornada que fue calificada como una "Noche Mágica", por el director del North American College, Omar Rojas.

Al finalizar la actividad, los pequeños recibieron la visita del Viejito Pascuero, Rodolfo el Reno, Olaf y otros personajes animados que bailaron el reguetón del Burrito Sabanero.

Una de las pequeñas que fue parte del coro fue Álanis Galloso, del prekinder B, quien junto a sus compañeros tuvieron que entonar las canciones en inglés y español.

Mientras los orgullosos padres no paraban de fotografiar a sus retoños.

Con éxito y una gran convocatoria concluyó el taller de origami llevado a cabo por el Museo del Mar, actividad que se realizó en ente las calle Sotomayor y el pasaje Sangra.

La actividad se desarrolló a partir de las 10 de la mañana y contó con la activa participación de niños, niñas y sus padres, quienes entusiasmados echaron a volar su imaginación para crear bonitas figuras de papel.

Sobre un tatami, colchón fino de origen japonés, los asistentes a la jornada creativa formaron parte del curso, creado especialmente para difundir la técnica de este reconocido y divertido arte nipón.

De esta manera, el público que se congregó en las afueras del Museo del Mar pudo trabajar libremente sobre la superficie dispuesta para el taller.

El curso de origami tuvo también música para acompañar la creatividad de los participantes durante el transcurso de la mañana.

Del mismo modo, fueron sorprendidos con regalos preparados especialmente para los niños y niñas que llegaron al pasaje Sangre.

Según la producción del evento, la iniciativa está contemplada dentro del ciclo de actividades de vinculación del Museo del Mar de Arica con la comunidad, el cual fue financiado gracias al 2 por ciento de Cultura del FNDR.