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Músicos ariqueños no olvidan icónica Rockatón

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Consistía en el evento imperdible del año, la concentración del rock ariqueño en su máxima expresión, todo esto con el fin de ayudar a los niños y niñas de la cruzada solidaria Teletón.

Desde los inicios de la primera década del siglo XXI, la emblemática Rockatón consideró un número importante de bandas locales, que utilizaban el escenario como vitrina para dar a conocer su trabajo musical, acompañado de un despliegue técnico y humano que en cada versión mejoraba con creces.

Había una dedicación de por medio. El concierto, que reunía la mejor artillería artística de los exponentes regionales, se planificaba con meses de anticipación; nada era al lote, y eso se notaba el día del show.

Se echa de menos en redes sociales y en la bohemia tertulia que se genera en los pubs de la ciudad. Por estos días, cercanos a las "27 horas de amor", se afinaban los últimos detalles y las salas de ensayo ariqueñas pasaban copadas. Todos querían dejar una huella sobre el escenario del Inacap.

Las poleras negras con logos de bandas metal comenzaban a oscurecer desde temprano la jornada, nadie quería perderse el espectáculo; y había que llegar preparado, porque la Rockatón contemplaba más de 10 horas de música directo a la vena.

Los acérrimos al rugir de las guitarras y las poderosas 'batacas' pagaban la entrada completa; sí, completa, no existían los regateos al ingreso, porque sabían que el objetivo principal del evento era recaudar fondos y aportar a los centros de rehabilitación a lo largo del país.

precursores

Una de las almas detrás de la organización del magno encuentro solidario fue Enrique "Moñi" Urrutia.

"La Rockatón es parte de mi vida, un espectáculo icónico que unía todos los estilos musicales en una sola fiesta. Lamento profundamente que no siga vivo, porque recitales de este tipo deberían continuar, sobre todo, por el valor adicional que implica cooperar con la campaña", indicó.

no olvidan

Jorge "Jim" Jiménez, quien fuera el carismático vocalista de los extintos Deserted, comentó sobre su experiencia en la Rockatón.

"Para mí y la banda significó mucho. Fue una época donde cada versión era mejor que la anterior, y donde tuvimos la oportunidad de tocar con un montón de gente (...) Incluso, recuerdo que una vez hubo dos escenarios de forma simultánea, era tremendo show; aparte, llegábamos temprano, porque no nos queríamos perder nada", expresó.

Agregó, además, que "es una pena enorme que ya no exista, porque junto con ayudar a la Teletón era una muestra increíble donde los talentos ariqueños tenían cabida".

Actualmente, Óscar Pérez se encuentra difundiendo el álbum debut de la banda local de death metal D.r.i.l.l.

El músico local recuerda con nostalgia las presentaciones que junto a Idark llevaban a cabo en la jornada solidaria de rock. "Fue un espacio musical enorme, donde las bandas jóvenes y de variados estilos lo dejaban todo arriba del escenario. En ese entonces, la calidad de los recitales en Arica era limitado y la Rockatón permitía mostrarte con un buen sonido, sin dejar de lado el hecho de colaborar con la campaña y los centros de rehabilitación", señaló.

"Bajo mi apreciación, las que se hicieron en 2003, 2004 y 2005 fueron inigualables, soberbias. Sabemos que es poco probable que vuelva a organizarse, pero no puedo mantenerme indiferente ante esto, ya que hay un gran número de recuerdos, momentos y situaciones que en definitiva me ayudaron a adquirir experiencia, y que gracias a esas presentaciones aprendí cosas que hasta hoy me sirven", sostuvo. J