Estimado Sr. Oreste Gerard, junto con saludarlo y en respuesta a su carta (publicada el miércoles 28 de octubre) en este medio, quiero agradecer vuestra preocupación por las obras de mejoramiento realizadas en el Nudo Vial Tucapel-Luis Valente Rossi.

Explicar a usted y dar tranquilidad a toda la comunidad, que esta situación se resolverá prontamente. El problema se produce en el encuentro del pavimento nuevo con el pavimento antiguo. No obstante, el ingreso al Nudo Vial comprende una reducción de velocidad que claramente se indica en una señalética, por lo que es una obligación hacerlo toda vez que se señala como máximo 40 k/h, por ende es de suma importancia que los automovilistas tomen las precauciones necesarias.

Asimismo, decir que este empalme de pavimentos será mejorado cuando cambiemos la calzada de asfalto antiguo a través del programa de Conservación de Vías etapa 5, cuyo inicio de obras está programado para el mes de diciembre.

Señalar además que la próxima semana estaremos licitando la última parte del Nudo Tucapel, ya que el proyecto se tuvo que ajustar debido a la existencia de una planta de cloración de Aguas del Altiplano que fue trasladada. Esta obra complementaria ya cuenta con los recursos para la ejecución de la ciclovía, aceras y calzadas, por lo que la comunidad ariqueña puede estar tranquila y confiada de los trabajos en pos del desarrollo urbano.

Juan Arcaya Puente

Director Regional

Serviu de Arica y Parinacota

Quisiera agradecer profundamente al personal del Poli Pediatría del Hospital Dr. Juan Noé Crevani por su oportuna reacción ante una crisis de salud que sufrí.

El día viernes 23 del presente asistí a un control médico en ese recinto, pero justo antes de que me llamaran comencé a sentirme mal. Sudaba frío y sentía muchas náuseas. Cuando me puse de pie, vomité todo lo que había comido y colapsé en los brazos de mi madre. Entre dos enfermeras me llevaron a un box y me acostaron en una camilla. Mi pulso estaba elevado y mi saturación era baja. Dado que llevaba varios días durmiendo mal, comiendo mal y con un estrés emocional muy fuerte, se me diagnosticó un colapso nervioso y se me ordenó reposo.

Ahora que ya me encuentro recuperada de ese incidente, deseo expresar mis agradecimientos al personal que me atendió, y en especial a la enfermera Yeny Álvarez, quien se quedó a mi lado todo el tiempo hasta que me estabilizaron.

Yo solía tener fuertes prejuicios contra el Hospital, pero ahora puedo asegurar que mi perspectiva cambió radicalmente.

Gabriela Statt