El artesano que rescata la tradición del volantín
Desde hace 22 años que Luis Álvarez Figueroa mantiene la tradición de los volantines, un verdadero clásico en el Mes de la Patria, la primavera y el viento.
Nacido en Arica, a los 18 años se fue a vivir a Los Vilos, pero en esta fecha regresa a su tierra para dar forma a estos verdaderos cometas que surcan el viento manejados con los hilos de las manos de tantos niños ariqueños y también adultos que suelen acompañar a sus retoños.
"Es una tradición familiar y además, siempre me ha gustado el volantín, por eso vuelvo de los Vilos y me quedo todo el mes", explica el experto volantinero.
Como gran conocedor del tema, afirma que el tipo de volantín que más usan o les gusta a los niños es el de 35 cms. por ambos lados, el tradicional, "y luego sigue el de 45 o medio pavo como se le conoce y después viene el pavo de 50 cms".
Pero también, tiene de los volantines chicos para pequeños de 2 años, que desde hace tiempo se llaman "la cambucha".
LA RECETA
En cuanto a la técnica para un buen uso responde que "lo ideal es elevar con un buen hilo, pero 100 por ciento de algodón, porque el otro que se usa de nylon es peligroso ya que el niño se puede cortar el dedo por la fuerza del viento".
En cuanto a los lugares ideales en la ciudad para elevar volantines, expresa que hay varios lugares como el mismo ex hipódromo (sector Las Machas), las playas donde el viento ayuda, no sólo para este deporte criollo, sino otros como el mismo parapente.
Pero, la recomendación principal del artesano Luis Álvarez es no usar el temido hilo curado por la cantidad de accidentes que han ocurrido.
Lo que lamenta es que hay equipos que compiten con este hilo, y al verse los volantines tan grandes, no se observa a simple vista los pedazos de vidrios que les colocan.
"A un ciclista, a un motorista, se le puede, incluso, cercenar el cuello, por eso lo más recomendable es que los niños no usen el hilo curado", aclara Álvarez.
DISEÑOS
Respecto de los diseños de los volantines, afirma que siguen siendo los preferidos los chilenitos con la bandera nacional, los de equipos del fútbol profesional como "de Colo Colo, la U. de Chile y Católica, aunque también he pensado hacer del club San Marcos".
Otro de los diseños son de clubes de volantineros, que existen en todas las regiones y salen a competir al aire libre.
Asimismo, están los infaltables diseños de los héroes de comic como de Superman, el hombre murciélago, etc.
EMBOQUES
Pero, junto con esto, además, en su taller de Gonzalo Cerda cerca de la calle Pedro Aguirre Cerda, ofrece lo que son los típicos emboques, el carrete de trupán, madera maciza y otros de carácter profesional.
"Estos los traigo del sur, porque allá están los mejores artesanos y la gente siempre los pide para estas fechas a fin de competir, divertirse y pasarlo bien", asegura.
En definitiva, este ariqueño que ama su tierra y vuelve cada año a cumplir con los sueños de los niños, reitera que "esta tradición de los volantines no puede terminar y sobre todo en este Mes de la Patria".
Lo que más le preocupa es la invasión de los volantines chinos y por eso cada septiembre regresa a confeccionar y vender los llamados medios pavos, pavos y el chupete. J