La historia está para romperla, para matarla, para dejar atrás los malos ratos, escribían las crónicas deportivas tras el título que obtuvo La Roja el día 4 de julio del 2015 en el estadio Nacional. Mientras todo Argentina lloraba, Chile entero se volcó a las calles a celebrar la primera Copa América en la historia de nuestro país.

Los ariqueños llenaron el pie del Morro de Arica para de alguna manera hacer sentir la felicidad contenida por generaciones pasadas. Sin embargo, luego de la champagne, los llantos de alegrías y los respectivos abrazos, la pregunta era cuándo llegaría el trofeo a la ciudad.

Y tras los anuncios con bombos y platillos el título logrado el día sábado 4 de julio ante Argentina ya está en Arica y ayer recorrió las principales calles para que la hinchada nortina mirara lo logrado por Bravo, Medel, Jara, Aránguiz, Vidal, Sánchez, Vargas y compañía.

Copa América en Arica

Desde temprano los ariqueños salieron a ver la Copa América que de acuerdo al municipio debería haber estado en exhibición en la villa Albergue, ubicada a un costado del estadio Mundialista.

Pero un error de información hizo que cientos de hinchas llegaran al estadio Carlos Dittborn y no pudieran observar el trofeo de manera directa; a cambio del mal rato los organizadores le entregaron una entrada con la cual hoy sí o sí tendrán acceso al galardón.

De hecho la Copa América partirá a las 9 de la mañana desde el Morro de Arica y desde el histórico peñón bajará en caravana hasta el Parque Vicuña Mackenna donde una carpa gigante esperará el título obtenido por los kamikazes de Jorge Sampaoli.

Una vez en el Parque, el trofeo podrá ser visto por todos aquellos hinchas que hayan reservado su entrada el día anterior, pero si no tiene su ticket igual acérquese hasta el céntrico lugar, ya que los organizadores andan tan felices mostrando la Copa que puede que le den un boleto en el mismo Parque..

Ayer la Copa América recorrió las calles de la ciudad, sin embargo, fue una salida 'no oficial' del trofeo. Lo bueno es que muchos hinchas locales pudieron ver de cerca La Copa y sacarse fotos junto a ella; otros aprovecharon de pedir entradas. J