Es uno de los funcionarios más queridos al interior de la Municipalidad de Arica por su sencillez y humildad. Es un hombre de pocas palabras y es una de las personas que guarda los secretos más ocultos de un alcalde; Juliano Aquiles Dinamarca Enríquez (45), es el conductor del jefe comunal. Ha traslado a tres alcaldes: Iván Paredes, Waldo Sankán y ahora a Salvador Urrutia.

Contó que desde joven es fanático de los autos y por tal motivo estudió mecánica automotriz en el Liceo Politécnico, se tituló y empezó a trabajar en un taller mecánico hasta que le ofrecieron ingresar a la Municipalidad. Llegó al servicio público, cuando cumplió 21 años, durante la gestión de Hernán Lagos, con el propósito de estar en el municipio como máximo seis meses. Actualmente, cumplió 24 años de servicio.

"Estaba trabajando en un taller mecánico y le hacia mantención al vehículo del chofer de Administración y Finanzas, me propuso ingresar de reemplazo a la municipalidad, luego llamaron a un concurso para ingresar a la planta, postule y quedé", contó.

Juliano llegó como estafeta y pasó a cumplir el rol de conductor; dijo que estuvo en Turismo, luego se dedicó a trasladar a los concejales y después pasó como el segundo chofer de Iván Paredes. Solo dejó de ser el conductor del alcalde, cuando asumió Carlos Valcarce, ya que este llegó con su propio chofer.

"Salió electo Waldo Sankán y me llevó de nuevo al equipo de la alcaldía, terminó su gestión y ahora estoy con el doctor Salvador Urrutia".

-Es una gran responsabilidad, tengo que velar por la seguridad de la máxima autoridad comunal. Uno comparte las 24 horas del día con el alcalde.

-Una de las cualidades primero es ser responsable, segundo tener el compromiso y lo más importante ser discreto.

-Lo que se habla dentro del vehículo se queda en el vehículo y no sale, la discreción es lo más sabio.

-Una excelente persona, lo considero un amigo, trabajé con él cuando era concejal, estuvo 12 años en ese cargo; hasta la fecha seguimos siendo amigos.

-Una excelente persona y súper trabajólico, si tiene que estar las 24 horas de pie, él está las 24 horas.

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-No me gusta mucho, pero la labor en la cual me desempeño, uno se va inyectando de a poco en la política.

-Una vez, no me encendió el vehículo al término de una ceremonia, producto que se trabó la chapa de encendido del vehículo. El alcalde era Waldo Sankán y no le quedó otra alternativa que trasladarse en otro auto de servicio y me dejaron a mi cuidando hasta que llegara un mecánico a socorrerme.

- Es un Dodge Durango del año 2006 ya tiene 9 años, harto recorrido. En estos momentos se encuentra en el taller mecánico para una evaluación, si es conveniente repararlo o darlo de baja, porque está dando varios problemas, fallas mecánicas. J