Con 25 años, la deportista ariqueña Sofía Bórquez solo piensa en ser parte del reducido grupo mundial de mujeres surfistas que corre olas gigantes.

Bórquez sabe que surfear olas de gran tamaño es una de las carreras más peligrosas para los que asumen su vida como surfista profesional, pero la nortina quiere dar la cara por Chile y mostrar que su capacidad supera cualquier obstáculo.

"Yo competí muchos años, salí campeona Latinoamericana y lamentablemente no pude encontrar el apoyo económico en la región y, bueno, como todo deportista sin apoyo comencé a frustrarme y desmotivarme hasta que conocí a un surfista ariqueño que se jugaba la vida en 'El Buey' y aprendí a correr aquella ola de categoría mundial", explicó la joven.

Agregó que con muy poco entrenamiento en una de las olas más grandes de la ciudad (El Buey) "quedé nominada al Billabong XL que es donde se premia a los mejores exponentes de este tipo de surf de olas grandes".

La deportista dijo que "hoy estoy entrenando con un surfista iquiqueño que rema El Buey cuando está gigante, por lo que debo aprender mucho de él para poder lograr mi objetivo".

La rider ariqueña, que hace años le perdió el miedo a las grandes masas de aguas que aumentan de vez en cuando en el océano, dijo que "quiero ser la única surfista en Chile que corre olas grandes. En realidad quiero ser la mejor del mundo, porque es muy reducido el grupo de mujeres que adopta esta rama deportiva, no son más de diez y obviamente quiero meterme entre ellas para luego tomar el primer lugar".

La atleta regional dijo que lo más fuerte que ha vivido en el agua fue quebrarse una vértebra. "Aquella vez estuve tres meses fuera del agua y debí recurrir a la piscina para poder rehabilitarme y montar nuevamente una ola". J