l Desde la Oficina de Emergencia del municipio, su encargada, Vivianne Pampaloni, explicó que si bien la pasarela fue construida hace unos 15 años, el mes pasado se reforzó su base.

Agregó que al ser tal, el movimiento es casi inevitable producto del lugar donde se encuentra. "En todo caso, por el bien y la tranquilidad de la gente, mañana (hoy) coordinaremos una revisión inmediata para que la Dirección de Aseo y Ornato verifique su situación y repare los posibles daños que pueda haber tenido, tanto en la madera, como en la estructura metálica", expuso. J

A las 8 de la mañana, a la una de la tarde, a las dos y poco antes de las 8 de la noche son los cuatro horarios, ida y vuelta, en que Paulina Ayca tuvo y tendrá que cruzar hasta que pare de fluir el agua del río, el puente que une Azapa con Las Maitas (kilómetro 11), el mismo del que tanto la joven, como un grupo de pobladores de ese sector, reclama por su tambaleante estado.

"Varios tablones están sueltos y por los pasamanos, fácilmente podrían caer los niños que pasan por acá", protesta la también secretaria del Comité de Aguas APR de San Miguel.

Y resulta que su reclamo no está injustificado, ya que aparte del meneo constante producto del viento y de quienes atraviesan, la pasarela presenta varias roturas y desgaste en las soldaduras que las unen en sus pasamanos, asunto que por estas fechas, hace un urgente llamado a su reparación.J