l Más de un millón de personas se tomaron ayer las calles de Sao Paulo en una gran manifestación contra la Presidenta Dilma Rousseff, la más multitudinaria de la jornada de protestas convocadas para hoy en decenas de ciudades del país, informó la Policía.
La manifestación, que ya es una de las protestas más concurridas en esta ciudad, tuvo lugar en la avenida Paulista, una amplia vía de tres kilómetros en el centro comercial de Sao Paulo.
Esta protesta, que fue convocada por grupos ciudadanos de tendencia opositora pero sin relación con los partidos políticos, estaba centrada contra el Gobierno de Rousseff, pero con diferentes objetivos.
Algunos manifestantes protestaron contra la corrupción, otros contra las medidas de ajuste fiscal de la economía -anunciadas en los últimos meses por el Ejecutivo- y muchos pidieron la dimisión o la destitución de Rousseff y la expulsión del poder del Partido de los Trabajadores (PT).
La avenida Paulista se convirtió en un mar "verde-amarillo", colores de la bandera brasileña, que estaban estampados en la ropa y aderezos de la mayoría de los participantes. J