Secciones

Emprendedores surten de forraje a Putre

E-mail Compartir

Una innovadora pyme que genera forraje de avena a muy bajo costo y en poco tiempo han desarrollado los hermanos Reyes Tamayo. Se trata de la Acuaponía, un sistema que combina la acuicultura (cultivo o crianza de especies acuáticas) y la hidroponía (cultivo en soluciones minerales en vez de suelo).

Ahorro de agua

Andrés Reyes dijo que en un principio tenían pensado hacer un proyecto de reciclaje y reducción, pero no era viable.

Los hermanos no se decepcionaron con este intento fallido y emprendieron la empresa Acuaponía Atacama, en donde el forraje se produce en 15 días.

"El sistema puede dar en 15 días 600 kilos y con eso se puede alimentar 300 cabezas de ganado", dijeron.

Francisco Reyes, su hermano, explicó que sólo el 20% del agua que utilizan se pierde y es sólo por la evaporación y la que consumen las plantas. Con este sistema pueden cultivar lechugas, espinacas, tomates y pimientos, pero para darle liquidez a su proyecto han optado por la comercialización de avena como forraje. Además del forraje, su fin es poder comercializar los peces que cultivan, pero primero esperan que una especie pueda ser regularizada en Sernapesca.

Pioneros

Francisco Reyes viajó a La Serena en donde realizó un curso en la Granja Agro- Acuicola Diaguita, que impartió la empresa mexicana BoFish, la cual es pionera en este sistema. "En la misma agua en que viven los peces se pueden sacar sus nutrientes y con ella se riegan las plantas. Las plantas limpian el agua y se recircula a la piscina de los peces a través de un circuito cerrado", explicó Francisco. La municipalidad de Putre es su principal comprador ya que deben abastecer de forraje a las comunidades de la alta y baja cordillera.

crecimiento

Por un tema de espacio no pueden seguir creciendo, ya que el sistema de tres pisos con cinco bandejas lo tienen en el techo de su hogar.

"Lo favorable es que el sistema es transportable, por lo que existe la opción de instalar una planta en el interior", explicó Francisco.

Andrés estudia tecnología médica y Francisco trabaja en una bencinera, pero a ambos les gusta tener su propia empresa y que vaya creciendo. J