Secciones

Cómo ser profesional y no morir esperando un trabajo

E-mail Compartir

Para nadie es un misterio que la realidad económica de Arica no es de las mejores en relación a las regiones vecinas que siguen gozando del boom minero.

Esto repercute en que muchos jóvenes profesionales y otros recién egresados no puedan cumplir con trabajar en lo que estudiaron o lo que sienten como su vocación.

Es el caso del lector que contó su experiencia de tener dos profesiones, la de profesor de Educación Física y la de prevencionista en riesgo, y en cinco meses no puede encontrar empleo.

Sebastian Díaz de 28 años, jefe de hogar, con un niño y otro por llegar, expresó su desesperación contando que ha dejado su currículum en varias partes, pero nada ha pasado.

Ayer, contó que debido a la carta en el diario, recibió una oferta para irse a Tocopilla, pero no hay nada concreto todavía.

EL BAROMETRO

Un barómetro de esta realidad es la Oficina de Información Laboral (OMIL) que funciona en el Parque Colón de la calle del mismo nombre, esquina de Chacabuco.

Jeannette Bustos Sepúlveda, psicóloga laboral y encargada subrogante de la Oficina de Información Laboral que depende de la Municipalidad de Arica, reveló que el porcentaje de ofertas laborales para profesionales es muy bajo, sólo cercano al 20 por ciento.

"Generalmente las ofertas laborales que se manejan son para oficios en la ciudad y para las empresas mineras de afuera, la mayoría para labores de aseo o de auxiliares", expresó la psicóloga.

En relación a los pocos trabajos para profesionales, cuenta que no son atractivos en lo económico, lo que suele desilusionar a los postulantes que tienen otra visión del mercado.

En especial, señala que las personas se hacen altas expectativas de los trabajos en el área minera, pero que la realidad no es tan así, porque los sueldos van de acuerdo a la especialización.

ejemplos

Un ejemplo que en la región cuesta hallar empleo para los profesionales, se puede deducir de lo mismo que se observa en la Oficina de Información Laboral.

Esto por cuanto, Jeannette Bustos, cuenta que hasta allí han llegado asistentes sociales, prevencionistas de riesgo, ingenieros, educadoras de párvulos y hasta psicólogos buscando trabajo en sus áreas y al no encontrarlo "deciden irse a laborar en las faenas mineras donde se va generando algún tipo de conexión".

La psicóloga es categórica al afirmar que "nos hemos encontrado en el reclutamiento de faenas mineras con muchos profesionales que al no tener opción laboral en su profesión, optan por irse a trabajar a las mineras en otras labores". Por ahora, Sebastian Díaz (67261254) no pierde las esperanzas que llegue una oportunidad.J