Desde hace un tiempo que en cuanta carrera que se organiza de larga distancia se ve pasar en primer lugar por la meta a una joven atleta.

Por su físico muy delgado no se sabe de dónde saca tanta fuerza y aguante, pero el caso es que Priscila Behelén Araya se ha convertido en una gran promesa del atletismo ariqueño.

En la corrida San Silvestre, la atleta del club Trotamundo y apoyada por el gimnasio Spartakus, dedicó su triunfo a Pablo Moureira, delicado de salud y el cual nunca se perdía esta carrera.

Priscila cuenta que este año se va a entrenar a Arequipa, desde donde la pidieron de sparring.

Su meta es llegar a competir en los Juegos Panamericanos de Canadá en la difícil prueba de los 3.000 metros con obstáculos. J