E l caso de Martina Norambuena, la pequeña ariqueña que fue diagnosticada al nacer con parálisis cerebral fue una de las historias más conmovedoras de las 27 horas de amor.
Martina llegó a la vida de su madre Lizeth Castillo cuando ésta aún era muy joven, por lo que su nacimiento fue una gran prueba de madurez y amor para su familia. Lizeth, su madre, contó en el video mostrado en el programa de TV, cómo su hija mayor se ha convertido en su cable a tierra y en su motivo para seguir luchando siempre un poquito más.
"Cuando llegué a Teletón tenía 17 años. Me sentía una niña acá, perdida en este mundo; no cachaba qué hacer, y tuve que seguir no más, acá me ayudaron. Fue duro igual al principio (...). La Martina me hizo aterrizar del cielo a la Tierra; me siento orgullosa de verla así, tan simpática... Y si ella no puede lograr caminar, no importa, porque va a poder hacer lo que quiera, es muy inteligente y le encanta aprender. Ella es feliz (...). Ella quiere ser mariposa, porque quiere volar. Que vuele conmigo, que no vuele sola".
La pequeña de 6 años, fanática de Campanita y la Princesa Valiente, llegó al mundo cuando sólo tenía 30 semanas de gestación. Venía con el cordón umbilical enrollado, situación que le provocó una asfixia y dos quistes cerebrales. Lizeth, quien era sólo una adolescente, había escuchado hablar de la Teletón de lejos y nunca pensó que este instituto se convertiría en uno de los pilares fundamentales de la rehabilitación de su primera hija.
"Martina asiste todos los días a la Teletón. Va desde los 3 meses de vida. Aprovecha todas las terapias y toda la gente del instituto la quiere mucho porque ella es así. Tal como la vieron en el video muy alegre y conversadora. Donde va la gente la quiere, porque es muy especial. Es encantadora y feliz", explica su madre.
Estudia en la Escuela Regimiento Rancagua y ahí también es querida por sus compañeros y profesores. Según lo que cuenta su madre, los demás niños la protegen y la cuidan como a un tesoro. "Es inteligente y hace caso en todo. Ella es como un diamante en bruto, una niña que tiene mucho por entregar", destaca.
Agrega que cuando le dijo que iban a grabarla y entrevistarla, la niña se puso muy feliz y todos los días le preguntaba qué tenía qué decir. Se fueron a Santiago el jueves y en el avión Martina estaba muy emocionada. Se fue en el asiento de la ventana y miraba las nubes extasiada.
"Estaba muy contenta. Se mandó hasta unos gritos de alegría. A ella le encanta que todo el mundo la mire y le converse".
Cuando salieron al aire (ayer en la mañana) se sentaron junto a la animadora Karen Doggenweiller, quien quedó encantada con la personalidad alegre y soñadora de Martina.
La niña se convirtió en una de las historias más conmovedoras de la Teletón, se miraba en la pantalla y encantó al público con su ángel.
La mamá comenta que su hija siempre ha dio fanática de las mariposas, las hadas y todo lo que vuele. Por eso se emocionó tanto en el avión.
"Se imagina todo un mundo en su cabeza y su sueño es poder volar. La Martina es un ángel que vino a alegrarnos la vida y enseñarnos que los problemas no son nada, ya que ella a pesar de su situación es feliz. Le agradezco a toda la gente que me ha apoyado a que ella pueda salir adelante cada día", finalizó la madre emocionada. J