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El drama de vivir con el pesode la obesidad mórbida

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Para nadie es un misterio que cuando se acerca el verano, en general en la sociedad actual con los estereotipos existentes de belleza, el tema del sobrepeso es algo que preocupa a todos.

Y cuál es la realidad de la región de Arica y Parinacota? Nada de positiva, porque tiene una tasa superior al promedio nacional en cuanto a obesidad y está entre los primeros lugares a nivel nacional en lo que es morbilidad infantil.

Dentro de esto, la obesidad mórbida es uno de los problemas más complicados de tratar, por lo constante que se debe ser en el tratamiento y lo costoso en caso de operaciones, al sólo estar cubierto por el plan Auge el hipotiroidismo, que es una de las causas de esta patología.

De acuerdo a los indicadores de la Seremi de Salud de la región, un 60 por ciento de la población sufre de algún tipo de sobrepeso y esto afecta de distintas formas a los ariqueños como algunos de ellos lo explican.

A los 24 años de edad, el conocido dirigente y árbitro de vóleibol Daniel Silva, empezó a subir de peso, llegando a los 170 kilos, pero un tratamiento lo hizo bajar algo, hasta que volvió a aumentar.

Los principales problemas que este sobrepeso le provocaron fue que no podía caminar sin cansarse, con lo que se vio limitado en su desplazamiento.

Sin embargo, su voluntad y empuje, además de la pasión por el deporte, lo llevaron a seguir adelante, aunque sometido a un tratamiento principalmente en cuanto a remedios y hábitos alimenticios.

Un problema a la tiroides fue lo que gatilló su problema de salud y dice que le dieron un tratamiento en base a pastillas, 'pero nada de operación, porque eso sale muy caro'.

Respecto a la alimentación, le prohibieron la bebida y debe consumir pocos fideos, aunque con las pastillas recupera el azúcar, y toma harta agua.

La vida para Daniel no tiene complicaciones, porque señala que se las arregla bien para movilizarse en su vehículo y cumplir con sus obligaciones laborales.

De hecho, cuenta que siempre tiene trabajo y es reconocido por sus capacidades, sobre todo en el ámbito de la formación y difusión del vóleibol.

Para las mujeres, en cambio, el tema es más complejo, dado los cánones que se imponen en la sociedad sobre la belleza ideal y el machismo que todavía impera.

Así lo refleja María Palta Jaque, la cual cuenta que sus embarazos fueron los que detonaron sus bruscas subidas de peso. Ella con su primer embarazo llegó a pesar 74 kilos, y de allí, en su segundo embarazo, alcanzó los 87 kilos con 38 años y con el último hijo estuvo pesando 94 kilos, pero después al sufrir de hipotiroidismo, quedó pesando cerca de 120 kilos, con 53 años.

'Yo no me traté y gran parte de mi gordura fue por esta enfermedad, que me la detectaron el 2004', recuerda María Luisa Palta.

Respecto a su tratamiento, se hizo ver por su isapre y le dieron un tratamiento, hasta que bajó algo de peso, pero luego volvió a subir después de dos años.

En la actualidad trata de comer poco, hartas verduras y frutas, pero sólo para mantener su peso, por el metabolismo de su enfermedad de la tiroides.

En lo que se refiere al tema de autoestima, reconoce que ha sufrido discriminación y que no ha querido trabajar en empresas, por lo que se gana la vida en forma independiente con el arriendo de casas.

'Hay algunas gorditas que son simpáticas y salen a trabajar, pero no es mi caso, porque me hacían bullying, pero no tengo problemas para ganarme igual la vida', expresa.

La obesidad mórbida, para el director del Departamento de Salud Municipal de Arica, Eduardo Gutiérrez, constituye una patología propia del siglo XXI y 'hemos pasado de la desnutrición a la obesidad'.

Esto en diferentes grados, hasta llegar a la mórbida y para detectarlo señala que primero se realizan los exámenes a la persona en cuanto a detectar su sobrepeso y se empieza a determinar si el problema es de carácter hormonal o por los malos hábitos alimenticios.

Se considera que un caso de obesidad es mórbido, severo o grado III cuando cumple uno de los siguientes criterios:

IMC (Índice de masa corporal) de 40.0 o mayor; IMC de 35.0 o mayor en la presencia de al menos una u otra morbilidad significativa como diabetes o hipertensión que pueden mejorar si hay pérdida del peso.

'Si el problema es más grave pasa a un nivel secundario pasando la persona o el paciente a los médicos especialistas, donde les dan un tratamiento, pero si se requiere una operación o algo quirúrgico, pasa al nivel terciario. Pero, en general, hay todo un sistema en la red de salud para esto y lo primero es la detección del problema por parte del médico en los consultorios', expresa el director del Desamu.

Gutiérrez derriba algunos de los mitos y aclara que esta patología atraviesa todas las clases sociales y está presente en todos los ámbitos de la salud, pasando a ser un problema de salud pública, estando ahora especialmente presente en los niños.

'Hoy, niños menores de 14 y menores de 9 años, están con obesidad mórbida y eso es lo preocupante, pero hay un nivel de respuesta', expresa.

En cuanto a cómo está la región de Arica y Parinacota en este problema, asegura que estamos en una tasa superior al promedio nacional y 'en uno de los primeros lugares a nivel nacional, por lo menos en lo que es morbilidad infantil'.

En esto parece darse una contradicción, porque todos dicen que vivimos en una región de buen clima donde se puede realizar ejercicios al aire libre, pero ambas regiones extremas, la XV y Magallanes son las que tienen los mayores índices de obesidad infantil, y llama la atención que esto ocurre sobre todo en los valles, donde se supone que hay un consumo mucho más sano, revela.

En cuanto al tratamiento, los especialistas apuntan a que el 90 por ciento tiene que ver con los hábitos alimenticios y es bajo hasta ahora el porcentaje donde hay que realizar algún tipo de intervención quirúrgica.

La operación más común es el by pass gástrico, que apunta a reducir la capacidad estomacal, pero si la persona no se cuida en un lapso de cinco años, pueden volver a su sobrepeso.

Marcia Jacqueline López Vivar, nutricionista de la Seremi de Salud, titulada en la Universidad de Antofagasta (ex sede de la U. de Chile), apunta a que los indicadores de obesidad en los niños menores de 6 años registrados en el sistema de salud pública de Arica y Parinacota, están alrededor del 9,2 por ciento, es decir de cada 100 niños, hay 9,2 con problemas de mal nutrición por exceso.

Además, hay un 30 por ciento o más de adultos mayores con este problema y del resto de la población hay otro porcentaje, que eleva a un 60 por ciento los casos en la región.

'Hoy en día la alimentación está cargada a eso, encontrando bebidas energéticas, y otras cosas, cuando lo que nos sobra es energía y la tenemos depositada como grasa en nuestro organismo; lo que hace falta es movernos más para quemar eso y dejar de comer alimentos hipercalóricos envasados, procesados, que tienen almidón de maíz, siendo éste un potenciador del apetito, porque mientras más alimentos procesados se comen, más hambre se tiene', explica la nutricionista.

En cambio, si la persona come alimentos sanos, frescos, naturales, se va a regular el apetito, lo contrario que provoca el almidón de maíz, que aumenta las ansias de comer.

La especialista acota que todos los productos elaborados como cecinas, bebidas, snacks, en envases o que tengan preservantes, vienen con jarabe de maíz, que mezclados con otras sustancias, los agregan a los alimentos como preservantes y provocan en el organismo que no quede satisfecho, causando el sobrepeso.

En cuanto a la conciencia de esta patología, en los últimos años hay una acción de combatir el sedentarismo, y los malos hábitos alimenticios.

'La obesidad no es sólo un problema de salud, también está la educación y por ello, todos deben involucrarse en el tema, trabajar unidos', manifiesta la nutricionista.

En cuanto al tratamiento, el Servicio de Salud ve la parte asistencial en menores de 6 años, embarazadas y adultos mayores, quedando una población la más joven con otros programas.

Dentro de la múltiple etiología de la obesidad, para su variante grave, se considera que una de las causas comunes que lleva a un individuo a esta condición es el consumo exagerado y excesivo de calorías, normalmente en alimentos de alta densidad calórica como los que componen la llamada comida rápida.

El sedentarismo o falta de actividad física también es uno de los factores importantes para llegar a la obesidad mórbida. Los trastornos hormonales y particularmente asociados a las tiroides también pueden provocar esta condición. J