Los precios de los tomates nuevamente están por las nubes y gracias a las heladas de Limache y Quillota, los agricultores están sacando cuentas alegres, desde septiembre a la fecha, mientras el ciudadano común piensa dos veces antes de comprar el fruto.

Ayer, el cajón de tomates estaba en 10 mil pesos, mientras que el kilo se cotizó a mil pesos en el agro y a 1.400 pesos en supermercados. Así, eran varios los agricultores que esperaban para enviar su producción a la capital, aprovechando los valores, marcados por la demanda de los puntos de distribución en la capital, específicamente en Lo Valledor.

Y aunque muchos creen que los empresarios están ganando a "manos llenas", ellos aseguran que la temporada alta habría comenzado solamente en septiembre.

AGRICULTORES

"Aquí nadie pone los precios, estos se fijan según la oferta y demanda, por lo que éstos pueden variar cada hora", explicó el pequeño propietario, quien mueve dos a tres cargas semanales hasta el punto de venta en el patio de camiones de la Agrícola del Norte.

Por otro lado, el empresario Karin Wong explicó que pese a los altos precios, "este año la temporada buena partió en septiembre y estamos rogando que siga hasta noviembre".

Wong fue claro en recalcar que las heladas del sur fueron la golondrina de invierno de esta temporada.

ALZAS Y BAJAS

El comerciante graficó así la situación del tomate durante este 2014. "Entre junio, julio y agosto sacábamos 4 mil cajas a la semana, con precios que fluctuaron entre los mil y 1.500 pesos, ya que había un exceso de tomate. Hoy sacamos cien cajas, por ejemplo, y hacemos el mismo dinero", agregó.

El productor, que tiene su packing en el camino a Alto Ramírez, en el valle de Azapa, adelantó que, "ahora no hay tomates en Arica", por lo que oferta y demanda podría generar nuevas alzas en el precio, en las próximas semanas. J