Autoengaño: así empieza un gran mentiroso
Mentirse a sí mismo, o bien, autoengañarse, es el primer paso para luego convertirse en un engañador imparable. Los que se autoengañan, según un estudio que se publicó en la revista Plos One, posteriormente tienen la capacidad, y el vicio, para engañar al resto.
El autoengaño, que es uno de los rasgos más frecuentes del ser humano, es negar la realidad objetiva que le compete a uno. Y es el primer germen del mentiroso compulsivo. Así lo comprobó esta investigación que tomó a un grupo de universitarios que recién habían entrado a la universidad y les hizo una prueba para medir sus talentos potenciales para engañar. A cada estudiante le pidieron que se pusiera una nota. Y luego cada cual debía poner una nota a los otros compañeros. El resultado fue que aquellos que se pusieron a sí mismos las notas más altas, eran, finalmente, a quienes el resto también les puso las notas más altas, independiente de su valía real. J