Secciones

Monolito rayado

E-mail Compartir

" Monolito rayado..." mucho más que molestarme en forma personal al ver la foto de lo mencionado en el asunto...es PENA lo que siento, ya que estos rayados los hizo una persona que vive en mi Arica y obviamente no tiene ningún sentir ni menos respeto por aquel símbolo patrio...como tantas otras cosas en Chile tendremos que instalar alguna reja de protección o algún punto de vigilancia Militar para salvaguardar este y otros símbolos más que hay en esta ciudad para evitar que estos energúmenos los dañen... o mejor los retiramos y damos paso a construcción de edificios o casas y nos olvidamos del asunto... ¿Cómo no se dan cuenta del valor que hay en una ciudad tan importante para Chile en el aspecto de nuestra historia?¿En qué estaremos fallando? ¿Educación, cultura, valores de la familia? ¿Es que acaso a aquellas mentes jóvenes con hambre de sabiduría no se les inculca el amor por su tierra, su historia, sus ante pasados? ¿O es muy tonto lo que digo...

René Lagos Fuentes

Oreste Ventura

E-mail Compartir

Oreste para sus amigos y familia, papi para sus hijos, tata para sus nietos. Fue un putreño, esposo, padre, hermano, tío, primo, amigo, suboficial mayor de Carabineros, zapatero, columnista de diario, rescatador y cultivador de las raíces culturales de su pueblo y muchas cosas más.

Nació en Putre en 1934, en el seno de una familia dedicada a la ganadería. Después de ejercer como carabinero en distintas ciudades de Chile y alcanzar el máximo grado en su escalafón, se acogió a retiro y abrió un taller de reparadora de calzado, con el cual siguió sirviendo al prójimo, pero sobre todo inició su labor más fructífera, la que hoy generaciones completas reconocen como legado, esto es rescatar y cultivar la cultura de su amado Putre.

A esta labor dedicó casi la mitad de su vida. A recolectar material, a asistir a seminarios sobre los pueblos andinos, a leer libros y documentos y rescatar la identidad de sus raíces. A organizar a los putreños que vivían su diáspora en Arica y aunando esfuerzos, con otros que compartían su ideal, a reconstruir lo que los definía como putreños.

De Oreste no solo su familia, sino muchos descendientes de los pueblos de Parinacota, aprendieron a revalorar quienes somos, una mezcla hispana-aimara, chilenos-andinos, cristianos hijos de la Pachamama, ambos elementos fusionados en uno.

Nosotros como familia lo recordamos como un buen hombre, el cual aprovechó las oportunidades que la vida le dio para hacer el bien y que vivió plenamente estas oportunidades.

Luis Varela Ventura