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Las 7 vidas del empresario que hizo de Las Cucardas un imperio

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Nacido en Tacna, pero criado en Arequipa, Moquehua, Lima y cuanta ciudad y país pudo recorrer y disfrutar (incluso Arica), Antonio Marco Meza Farías fue despedido por unas mil personas entre el velorio del jueves y el funeral de ayer, en su ciudad natal.

El dueño del local nocturno dedicado al comercio sexual 'Las Cucardas', falleció tras chocar su moto 'en su ley', como dijo ayer su familia, quien agregó que el Cholo Meza (como era conocido por medio Perú) tuvo siete vidas o quizás más. Aquí algunas de ellas.

Una de las pasiones, o quizás la que vivió más a concho Marco, fueron las motos. Kathy, la segunda de sus dos hermanas, confiesa que a los 15 años se inició en el mundo tuerca. 'De ahí no se despegó más, ni dejó de lado. Lo suyo no era el fútbol, ni siquiera la selección, sino que las dos ruedas. De hecho, una vez le dio por comprar una moto de agua... al mes siguiente volvió a lo suyo', cuenta.

En medio del mismísimo funeral, la familia comenta que vez que a Marco le tomaban una foto, él ponía los brazos arriba. ¿Por qué? 'Porque él decía que era un rey, algo así como un Dios, pero siempre en buena, nada de agrandarse, ni algo por el estilo', relatan.

Si en Chile es el Viejo Pascuero y en gringolandia es Santa Claus, es sabido que los peruanos le llaman Papá Noel al hombre de traje rojo y barba blanca que trae regalos en Navidad. Y así era como los sobrinos llamaban a Marco. 'Navidad que llegaba, Navidad que nos daba propina, sobre todo a los que ya estábamos más creciditas, como yo', comenta Mayra, una de ellas. 'Decía que nos gastáramos todo, pero ojalá que no tomáramos ni hiciéramos cosas malas', agrega.

La historia se remonta a 30 años. Ahí, la abuela de la familia, y quien fundó el local nocturno como 'Escorpión', después patentó el mismo como 'Las Cucardas', emulando a un antiguo cabaret de Lima. En todo caso, la propia hermana de Marco revela que 'hace un año tenemos una situación judicial pendiente por la patente del nombre, así que desde esa fecha, el local se llama Cucas.com', dice. Y ojo que no tiene página web.

Tal era la afición del empresario por las motos, que la familia contabilizó 14 accidentes por esa vía, sin nombrar el que le costó la vida el miércoles. Es más, desde uno de los anteriores se desprende una anécdota que ayer se hizo pública, gentileza de su hermana. 'Tantos eran los accidentes que él tenía, que una vez mi mamá dijo que si alguien le tocaba la puerta para decirle que Marco había chocado o volcado, ella no iba a creer. Y eso ocurrió un día, cuando llegó la policía a la casa para avisar. Aproveché que se quedó dormida, y me fui calladita al hospital. Ahí estaba mi niño con una fractura de cadera', cuenta.

Por su posición económica, al fallecido empleador nunca le gustó aparentar mal. De ahí por su afición por dos marcas: Tomy Hilfiger y Nautica. En cuanto a los tragos, desde el Johnny Walker etiqueta negra para arriba.

Luego de estar involucrado en drogas y explotación sexual, Marco se aburrió de la prensa. 'En pocos días más debía interponer una demanda contra la prensa tacneña, por las calamidades que hablaban. No lo logró y es más, incluso su muerte quedó reflejada con cuerpo y todo en una portada del diario', comentan. J

Las 7 vidas del empresario que hizo de Las Cucardas un imperio

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Nacido en Tacna, pero criado en Arequipa, Moquehua, Lima y cuanta ciudad y país pudo recorrer y disfrutar (incluso Arica), Antonio Marco Meza Farías fue despedido por unas mil personas entre el velorio del jueves y el funeral de ayer, en su ciudad natal.

El dueño del local nocturno dedicado al comercio sexual 'Las Cucardas', falleció tras chocar su moto 'en su ley', como dijo ayer su familia, quien agregó que el Cholo Meza (como era conocido por medio Perú) tuvo siete vidas o quizás más. Aquí algunas de ellas.

Una de las pasiones, o quizás la que vivió más a concho Marco, fueron las motos. Kathy, la segunda de sus dos hermanas, confiesa que a los 15 años se inició en el mundo tuerca. 'De ahí no se despegó más, ni dejó de lado. Lo suyo no era el fútbol, ni siquiera la selección, sino que las dos ruedas. De hecho, una vez le dio por comprar una moto de agua... al mes siguiente volvió a lo suyo', cuenta.

En medio del mismísimo funeral, la familia comenta que vez que a Marco le tomaban una foto, él ponía los brazos arriba. ¿Por qué? 'Porque él decía que era un rey, algo así como un Dios, pero siempre en buena, nada de agrandarse, ni algo por el estilo', relatan.

Si en Chile es el Viejo Pascuero y en gringolandia es Santa Claus, es sabido que los peruanos le llaman Papá Noel al hombre de traje rojo y barba blanca que trae regalos en Navidad. Y así era como los sobrinos llamaban a Marco. 'Navidad que llegaba, Navidad que nos daba propina, sobre todo a los que ya estábamos más creciditas, como yo', comenta Mayra, una de ellas. 'Decía que nos gastáramos todo, pero ojalá que no tomáramos ni hiciéramos cosas malas', agrega.

La historia se remonta a 30 años. Ahí, la abuela de la familia, y quien fundó el local nocturno como 'Escorpión', después patentó el mismo como 'Las Cucardas', emulando a un antiguo cabaret de Lima. En todo caso, la propia hermana de Marco revela que 'hace un año tenemos una situación judicial pendiente por la patente del nombre, así que desde esa fecha, el local se llama Cucas.com', dice. Y ojo que no tiene página web.

Tal era la afición del empresario por las motos, que la familia contabilizó 14 accidentes por esa vía, sin nombrar el que le costó la vida el miércoles. Es más, desde uno de los anteriores se desprende una anécdota que ayer se hizo pública, gentileza de su hermana. 'Tantos eran los accidentes que él tenía, que una vez mi mamá dijo que si alguien le tocaba la puerta para decirle que Marco había chocado o volcado, ella no iba a creer. Y eso ocurrió un día, cuando llegó la policía a la casa para avisar. Aproveché que se quedó dormida, y me fui calladita al hospital. Ahí estaba mi niño con una fractura de cadera', cuenta.

Por su posición económica, al fallecido empleador nunca le gustó aparentar mal. De ahí por su afición por dos marcas: Tomy Hilfiger y Nautica. En cuanto a los tragos, desde el Johnny Walker etiqueta negra para arriba.

Luego de estar involucrado en drogas y explotación sexual, Marco se aburrió de la prensa. 'En pocos días más debía interponer una demanda contra la prensa tacneña, por las calamidades que hablaban. No lo logró y es más, incluso su muerte quedó reflejada con cuerpo y todo en una portada del diario', comentan. J