El destino le puso en la vida una nueva prueba: asistir otro parto
Aasistir un parto, sin un solo elemento, quizás le toque una sola vez en la vida, pero si el destino le pone nuevamente la prueba, quizás no quiera volver a repetirlo.
Sin embargo, para el suboficial de Carabineros, Bienvenido García, con casi 30 años de servicio, el llamado al 133, en horas de la tarde del sábado, le trajo a la mente, un parto que asistió, cuando estaba destinado en Cañete.
El llamado del destino, no pasó inadvertido y junto al cabo primero Rodolfo Cancino, abordaron un furgón desde la Tercera Comisaría y partieron hasta la pampa de Chaca.
Minutos antes una ciudadana boliviana identificada como Mirtha Aruquipa, de 24 años, realizaba un llamado desde el kilómetro 60 de la Panamericana Norte.
Ella vive en el sector de Chaca, donde trabaja para una familia chilena.
La mujer estaba en las últimas semanas de su embarazo. Había comunicado a su patrona, que ya estaba con algunos sintomas, que la dejaron impaciente.
Sin embargo, como relató, las contracciones comenzaron a venir y ahí decidieron llamar a Carabineros, cuyo contacto telefónico la cruzó en la vida del suboficial Bienvenido García, el que -con un poco de nerviosismo- aceptó el reto del destino nuevamente, del cual no dudo ni un momento, como dijo.
'Nos dirigimos al lugar lo más rápido posible, aunque los cortes de tránsito en la ruta 5 Norte, nos quitaban minutos importantes', partió relatando el suboficial García.
'Cuando llegamos al lugar, nos percatamos que la mujer estaba lista para dar a luz, por lo que iniciamos el trabajo de parto, al igual como lo hice hace 16 años en Cañete', prosiguió.
Frente a la actitud y reacción en una situación tan complicada, el funcionario policial explicó orgullosamente que, 'esto es lo que nos enseña nuestra institución, como son los valores, ya que los más importante es ayudar a las personas', remató.
Por su parte Mirtha Aruquipa, solamente tenía palabras de agradecimiento para los funcionarios, 'estoy muy contenta. Tuve mucho miedo por la bebé, pero me calmé y me sentí más segura cuando apareció la patrulla de carabineros', aclaró.
Minutos después, ambos policías habilitaban la parte trasera del furgón y partían a la Maternidad de Arica, con el deber cumplido. J