El delantero de la escuela República de Israel no tuvo piedad con la oncena del Liceo Jovina Naranjo y demostró en una final de 60 minutos que las fichas que depositaron en su juego no fueron en vano.

Daniel Monardes fue una de los protagonistas en el título que la oncena de fútbol de la escuela República de Israel consiguió ayer ante sus similares del Liceo Jovina Naranjo. Los campeones se impusieron con un contundente 5-1 y Monardes se consagró con dos goles además de una serie de habilitaciones.

El técnico del número nueve de la escuadra ganadora, quien lo llevó al equipo desde otra escuela explicó que 'hicimos una apuesta. Con este título nos está demostrando que no fue en vano y que puede salir adelante con el fútbol'.

Hincha de Colo- Colo, Monardes comenta que su sueño es ser futbolista profesional y para eso está trabajando.

'A mí me trajeron desde otra escuela, el profe me vio jugar y luego me preguntó si quería cambiarme de colegio, así que fue buena la decisión que tomé'.

Y sus compañeras del República de Israel le hicieron sentir que sus lujos en el campo de juego son algo que les llama la atención y que les permite bajar estrellas.

De hecho cada vez que Monardes tocaba el balón las niñas que ocuparon la galería del estadio Canadela le hacían barra para hacerle sentir al jugador que su presencia en la final de la Copa Daem se debía al buen juego que muestra cada vez que se coloca la número 9.

Monardes siente un poco de vergüenza ante la afirmación y dice que sus compañeras de colegio 'vienen a ver al equipo que llegó a la final. Lo bueno es que tuvimos un juego regular durante los cerca de 5 meses de campeonato. Nos enfrentamos a 20 equipos de colegios públicos y nadie nos pudo derribar'.

El delantero que se peina igual que Cristiano Ronaldo dijo que 'si bien mi sueño es ser un futbolista profesional, también quiero llegar a uno de los mejores equipos del mundo como es el Real Madrid'. J