S u llegada a la ciudad se produjo casi por una casualidad. De su natal Concepción se trasladó a San Pedro de Atacama para exponer su trabajo y desde ahí que viajó a Arica sólo por motivos turísticos. Pero la ciudad, especialmente su cultura e identidad, le gustaron tanto que decidió quedarse y probar suerte en la Eterna Primavera. Ya son cinco años los que lleva Roberto Valencia radicado en Arica. Su mayor motivación fue quedarse para rescatar la identidad pictórica, el arte rupestre como los geoglifos y fusionarlos con el arte moderno.
El artista plástico exhibe su trabajo en óleo y carboncillo en vidrio en el paseo 21 de Mayo, donde atrae al público por su técnica pictórica en 3D. Cuenta que todo lo ha aprendido de forma autodidacta, ya que no tuvo 'las lucas' para estudiar. Eso sí ha realizado talleres de arte independiente para complementar su inquietud artística. 'He hecho hartas cosas en mi vida, pero llegar a esto para mí fue a través de una búsqueda, un escape y también un interés para embellecer y reciclar', asegura Valencia, quien compra los despuntes de las vidrierías y recolecta los desechos de distintos lugares. Antes pintaba con aerosol, pero cuando se dio cuenta de la contaminación que provocaban estos productos en la capa de ozono decidió dejar de ocuparlos para siempre. Ahora sólo pinta con sus dedos sobre los vidrios y también en las telas, fierro y madera. Además trabaja para tiendas artesanales de San Pedro de Atacama donde envía su trabajo que es comprado en su mayoría por turistas europeos que visitan esa localidad.
Roberto también ha realizado murales en establecimientos educacionales. El año pasado hermoseó nueve muros del colegio Juan Pablo Segundo con motivos de paisajes andinos , el rescate del picaflor y las presencias tutelares. En el colegio Cardenal Silva Henríquez también decoró la pileta y el jardín infantil. 'Mi idea es poner en valor nuestros paisajes puros y limpios de la cordillera. Estoy muy contento por el recibimiento que he tenido acá. He conseguido tranquilidad y sosiego a mi búsqueda. Gracias a Dios acá se puede vivir del arte'. El artista agrega que le gustaría que el departamento de Cultura y Turismo de la municipalidad tuvieran más objetividad con respecto a los permisos, ya que el suyo vence hoy y quiere seguir fomentando la identidad y el turismo artístico en Arica. J