Cero respeto a los estacionados
En calle Yungay se ha hecho frecuente que a los autos estacionados los choquen y nadie responde por los daños. Ayer, llegó carabineros para tratar de identificar a estos antisociales sin respeto.
En calle Yungay se ha hecho frecuente que a los autos estacionados los choquen y nadie responde por los daños. Ayer, llegó carabineros para tratar de identificar a estos antisociales sin respeto.
Ya son varios los reportajes de cadenas nacionales de TV que difunden las bondades de Arica como la gastronomía, los paisajes, el surf, la tranquilidad y especialmente el clima. Una buena excusa para sacar envidia a los sureños.
Bastante viento hizo ayer en Arica. Fueron varias techumbres en nuestra ciudad las que sufrieron las consecuencias, lo que además produjo riesgo de accidentes.
Se requieren soluciones prontas, porque 'está en peligro la vida de las personas y de familias'. Fue la conclusión categórica del diputado Luis Rocafull luego de la visita que realizó junto al intendente Emilio Rodríguez al sector de la Población Tucapel 2, donde hace unos días, Diario La Estrella de Arica dio a conocer las riesgosas condiciones en las que viven vecinos debido a la presencia de enormes socavones bajo sus viviendas. El tema fue recogido también por la prensa nacional, la que dejó en evidencia la precariedad y el peligro en el que estaban sumidos los pobladores.
Hoy se puede decir que siempre la suma de esfuerzos y voluntades puede solucionar aún los problemas más complejos. El peligro de los socavones para estos pobladores se arrastraba hace casi una década, concretamente fue en el año 2007 cuando una vecina declaró que dio la primera alerta respecto a lo que estaba pasando en los terrenos bajo su casa, pero a partir de ese momento no hubo soluciones concretas.
Como dijo Marco Arias, el emblemático poblador conocido en el sector como 'El Minero 34', tuvo que aparecer el 'pique' bajo su inmueble para que la sociedad se sensibilizara respecto a lo que le estaba ocurriendo. De aquella sensibilidad dada a conocer en estas páginas y posteriormente en otros medios, se abrió la posibilidad para una esperada solución.
La visita de las autoridades regionales terminó el compromiso de resolver el problema. Un catastro permitirá reconocer los casos más difíciles e iniciar idealmente los trabajos en las próximas tres semanas.
Es importante que para casos como éste, las instituciones funcionen. Más allá de anteponer la búsqueda de responsables -de lo cual se encargarán las investigaciones correspondientes- el bien mayor es la calidad de vida, la tranquilidad y la seguridad de los vecinos. Es eso lo que primero debe resolverse.
Luego, las investigaciones, sumarios y estudios tendrán que dar cuenta, principalmente, de los procedimientos que se deben seguir para que episodios como éste no se repitan, con los costos que traen para los vecinos.