Los vecinos de la población Tarapacá Oriente se cansaron de las excusas y del abandono, tomando de una vez por todas el 'toro por las astas'.

Y es que luego de varios años solicitando a la junta de vecinos algún esfuerzo para reparar la cancha de tierra, hace dos semanas decidieron reunir fondos por su propia cuenta y comenzar a devolverle la vida a un lugar que hoy dista mucho de lo que fue en un pasado.

Como en muchos otros sectores ariqueños, la lucha constante con el alcohol y las drogas fue el gatillante para que decidieran intervenir y fomentar el deporte como se hacía años atrás.

'Antiguamente la arreglaba el vecino Patricio Hidalgo, pero como ahora trabaja y es mayor ahora la arreglé yo en colaboración de los vecinos y los niños del pasaje', nos cuenta Mario Araya, joven de 24 años.

En las noches es donde hay más problemas, puesto que la oscuridad del lugar ha generado una verdadera 'boca de lobo' que impide a los vecinos el poder disfrutar de su barrio.

Con mucho esfuerzo y dedicación, la gente del lugar pintó las galerías, los postes, colocó neumáticos para la protección del recinto y compró mallas para colocar en los arcos, en una primera etapa de un ambicioso proyecto que buscar revivir los torneos poblacionales que se jugaban en antaño.

Es más, Mario nos cuenta que rescataron unos árboles del tipo Miaporos, los cuales adornan los costados del lugar y que a mediados de agosto, Conaf haría entrega de pimientos para hermosear aún más el lugar.

- Nosotros no pedimos nada más que la reparación de las luminarias y la compra de mallas para cercar la cancha. Es lo único que necesitamos para poder devolver la alegría a los niños. J