Fue en 1977 que el sueño del matrimonio Palma - Armijo empezó a tocar la tierra.
Por esos años, ambos llegados desde el sur, y luego de trabajar un par de años para la firma Importadora Wall en Arica, decidieron que tras la quiebra de esa empresa, habían conocido lo suficiente como para emprender en una casa de repuestos tipo ferretería de manera independiente.
Ya con todo el conocimiento, decidieron instalar su propio negocio, simplemente llamado Repuestos Palma, el que si bien partió en Santa María, luego se trasladó a unos viejos terrenos del Serviu de Diego Portales con Azolas, bajo los edificios del sector, donde se mantendrá hasta el 31 de julio próximo, fecha de cierre del local.
'Lo decidimos con mi esposo (Juan Francisco) y mis dos hijos (Francisco y Eduardo), porque mi marido sufrió mucho tras su primer derrame cerebral hace seis años y el segundo hace dos', cuenta Sara Armijo, quien administró el local comercial tras el accidente vascular de su esposo.'
'Uff. Por acá pasaba medio Arica y más te diría yo. Éramos un negocio chico, pero que igual le cumplíamos. Automotoras como Cánepa, Chevrolet, Velásquez, Carevic y otras grandes en ese tiempo eran abastecidas por nosotros. En realidad creo que gracias a todos nuestros clientes, ayudamos a criar a nuestros hijos y nunca les faltó nada', explica Sara.
'Creo que el mejor tiempo de nuestro local fue en los '90, pero ahora mi esposo se enfermó y a pesar de que al principio quiso volver, fue complejo. Por lo menos nos vamos contentos de saber que tuvimos muy buenos y fieles clientes', finalizó. J