Secciones

Se 'arriendan' amigos

E-mail Compartir

La moda proviene, por supuesto, desde Japón. En ese país la soledad es frecuente, no hay una interacción visible y nadie aborda a nadie en la calle. La gente es sola. Por eso en Japón debieron confeccionar un mecanismo para que los japoneses tengan amigos. Y fundaron, entonces, las agencias para arrendar amigos por una hora.

Uno puede intuir el gancho comercial: '¿Se siente solo, con ganas de conversar con amigos y no tiene amigos? ¡No se preocupe! ¡Acérquese a nosotros y por un módico precio le facilitamos un amigo instantáneo! ¡Tendrá amigos por una hora!'. La iniciativa, aunque parezca raro, tuvo un éxito fulminante. Vino un boom de solitarios reclamando amigos por contrato. Y, finalmente, la idea se expandió a occidente.

El 2009 Scott Rosenbaum instaló la idea en Estados Unidos: fundó el sitio RentAFriend.com. Por sólo 10 dólares usted puede arrendar un amigo por una hora. Si es un amigo más especial, puede pagar hasta 50 dólares la hora. Pero, ojo, esto se trata de amistad. Scott lo dice claramente: 'No está permitido el contacto físico'. Al menos durante la duración del negocio.

Abundan los posibles afiches de promoción: 'Págame y te escucho'. 'Te quiero mucho, amigo, pero sólo por media hora más'. 'Págame un bono extra y me reiré con tus anécdotas'. Etc. Los sicólogos del mundo se han alarmado de esta tendencia. Carole Leiberman, sicóloga norteamericana, apuntó lo lógico: 'La amistad no se paga. No pagas a un amigo para que te acompañe a comer'. Y, desde Chile, el sicólogo José Manuel Durán opinó que 'es uno de los fenómenos más tristes de la era moderna. Pagar por amigos postizos. Hay pocas cosas más deprimentes'.

Lo cierto es que, dígase lo que se diga, el fenómeno del arriendo de amigos sigue en alza. O, mejor dicho, lo que cada vez está más en alza sea la soledad. J